ReL, 26 marzo 2013
El Papa Francisco, que como cardenal no tenía ordenador y
usaba apenas una máquina de escribir electrónica, se ha convertido en el primer
Pontífice que habla del demonio en una red social, en su cuenta Pontifex de
Twitter ( https://twitter.com/pontifex_es ).
El pasado domingo publicó dos "tuits": uno a las
12.30, sobre la JMJ ("Aguardo con alegría el próximo mes de julio, en Río
de Janeiro. Les doy cita en aquella gran ciudad de Brasil"), y otro, una
hora después, sobre el demonio: “No debemos temer al Maligno cuando nos dice
que nada podemos hacer contra la violencia, la injusticia y el pecado”, fue la
exhortación del Pontífice en italiano, inglés, francés, alemán, portugués,
árabe, polaco, latín y español.
Aunque Benedicto XVI y Juan Pablo II hablaron del demonio en
numerosas ocasiones, Francisco lo ha hecho desde sus primerísimos discursos
como Pontífice.
“No cedamos nunca al pesimismo ni a la amargura que el
diablo nos ofrece cada día”, dijo Francisco en un encuentro a los dos días de
ser elegido Papa con los cardenales en la Sala Clementina del Palacio
Apostólico del Vaticano.
El día anterior, en una misa oficiada en la Capilla Sixtina
ante los purpurados que participaron en el cónclave, el primer Papa
latinoamericano señalaba: “Quien no reza al Señor reza al diablo, cuando no se
confiesa a Dios, se confiesa a la mundanalidad del demonio”, afirmó en esa
homilía clave en la que expuso los principios su pontificado: “Caminar,
Edificar, Confesar”.
Siendo arzobispo de Buenos Aires, Jorge Bergoglio declaró en
2010 que la redefinición de matrimonio que impulsaba Cristina Kirchner era “una
movida del diablo”, una “pretensión destructiva del plan de Dios”.
Con un Papa que habla del demonio y de las estrategia
demoníacas para transformar el mundo para el mal, los cardenales y obispos se
sienten más libres para denunciar su siniestra figura: así, en la masiva
manifestación pro-vida del pasado fin de semana en Lima, el cardenal Cipriani
no dudo en calificar al aborto de "demoníaco", para escándalo de
algunos medios de comunicación. Con este Papa Francisco, estas comparaciones
van a ir a más.