*Un psiquiatra da su veredicto sobre Garabandal

P. Francisco A. Benac S.J.
Bombay, India.



El Dr. Luis Morales, de Santander, un conocido psiquiatra, había dirigido las investigaciones sobre Garabandal en 1961. En una conversación personal con el psiquiatra de Barcelona, el Dr. Ricardo Puncernau, yo supe que el Doctor Morales le había dicho que él estaba interesado en Garabandal y que había cambiado su opinión respecto a las apariciones. 

1961. El Dr. Luis Morales fue oficialmente elegido con otros pocos para investigar las apariciones de Garabandal. La comisión actuó muy a la ligera, apenas viendo a las cuatro videntes más de unas pocas veces. El Dr. Morales, en un testimonio personal de 136 palabras, declaró que "todo el asunto de Garabandal era nada más que una serie de fenómenos vulgares e histéricos". 


3 de septiembre de 1978. El Dr. Morales  cambió tatalmente de actitud afirmando: "Ahora veo la realidad existencial de Nuestra Señora en Garabandal. Considero a Garabandal como a Fátima, un don de la Providencia para la humanidad...", "...Garabandal es en verdad un regalo de Cristo a nosotros a través de la Madre...". Al final de la conversación el Dr. Morales, contestando a mi última pregunta, exclamó: "¡Ah, sí, Garabandal ha sido una manifestación de la Divina Gracia... !".

Posteriormente afirmó que él aceptaba el hecho de que lo sobrenatural estaba presente en Garabandal y que los mensajes ciertamente venían de Dios.


Asimismo me explicó como, un mes antes de morir de cáncer su esposa en una clínica, él había pedido prestado un crucifijo besado por la Santísima Virgen en Garabandal a otro paciente canceroso. El doctor explicó como le habían desaparecido los dolores a su esposa y como ella había permanecido en una paz interior hasta el fin. Aquí apuntó con evidente alegría como el otro paciente de cáncer que le había prestado el crucifijo se recobró totalmente, que en palabras del Dr. Morales fue un verdadero milagro. Ahora trabaja en un banco. 


Esta editorial debe ser suficiente por el momento para iluminar a los lectores respecto a la posición de la Iglesia sobre Garabandal. Para comprender la aparentemente larga espera de las autoridades eclesiásticas en pronunciar su juicio, es bueno recordar que desde el tiempo de las apariciones de Fátima en 1917, la Iglesia nunca habló hasta el año 1930, cuando el Obispo de Leiría hizo un corto anuncio oficial sobre el respecto.


P. Francisco A. Benac S.J.
Bombay, India.