Por Vicente Menjivar
Expertos afirman que el número de cristianos en China está creciendo tan rápido que los próximos años se convertirá en el país con más cristianos en el mundo.
De acuerdo con las cifras más recientes que se tienen registradas, en el 2010 China tenía más de 58 millones de evangélicos protestantes en el país, superando a Brasil, que en ese año tenía 40 millones, y a Africa del Sur, que contaba coon 36 millones de protestantes también durante ese año, según el Foro para la Religión y Vida Pública del Centro de Investigación Pew.
“Según mis cálculos, China está destinada a convertirse en el país cristiano más grande muy pronto. Va a ser en menos de una generación. No mucha gente está preparada para este cambio dramático,” dijo Fenggang Yang, profesor de sociología de la Universidad de Purdue, y quien también es autor de “Religión en China: Supervivencia y Renacimiento bajo un régimen comunista.”
Yang dijo también que cree que el número de cristianos en China aumentará a 160 millones en el 2025, sobrepasando a Estados Unidos, que tuvo aproximadamente 159 millones de evangélicos protestantes en el 2010, pero que de acuerdo con estadísticas recientes es un país que está experimentando una disminución en el número de cristianos en años recientes.
El experto también ha pronosticado que para el 2030, la cantidad total de la población cristiana en China, incluyendo católicos, excederá a los 247 millones, superando también a México y Brasil.
Según historiadores las congregaciones cristianas han estado en aumento en China desde que las iglesias abrieron nuevamente sus puertas tras la muerte del dictador Mao Zedong en 1976.
La iglesia cuenta con una capacidad para albergar durante sus servicios religiosos a aproximadamente 5,000 personas, y fue construido bajo un costo de $8 millones.
“Es algo maravilloso ser un seguidor de Jesucristo. Da una confianza grande. Si todos en China creyeran en Jesús entonces no tendríamos la necesidad de estaciones de policía. No habría gente mala y por ende no habría crimen,” dijo Jin Hongxin, un visitante de la iglesia.
Curiosamente, China es oficialmente un país ateo, aunque de acuerdo con un reporte del periódico británico The Telegraph escrito por Tom Phillips “eso está cambiando rápidamente a medida que la mayoría de sus 1.3 billones de ciudadanos buscan sentido y confort espiritual.”