*Todas las profecías pueden detenerse

Habla Dios Padre, a Javier Viesca, México, 2006

Todo lo anunciado puede detenerse y cambiarse por un gran Bien, si vosotros detenéis vuestra vida de pecado. 

(Lenguas...,) Hijitos Míos, ciertamente estáis en los tiempos profetizados, ciertamente tenéis las profecías sobre vosotros, ciertamente tenéis anunciado que de aquí en adelante todo será peor y peor para vuestra vida, tanto en lo material como en lo espiritual. Los pueblos irán sintiendo el caos, irán sintiendo el dolor, irán viviendo la maldad satánica, porque así lo han buscado y lo han preferido. Profetizado está en las Escrituras, profetizado está a través de Mi Hija, la Siempre Virgen María, profetizado está a través de los siglos.

El hombre sigue cayendo porque no ha querido buscar a su Dios, a Mí, vuestro Padre. Os he querido levantar, pero seguís corriendo hacia el desfiladero, preferís el suicidio espiritual a regresar a Mí, porque hay que pasar por ésa puerta estrecha, entre abrojos y espinas, por el dolor, pero Dios dará gozo eterno.

Sí, Mis pequeños, profetizado está, pero no es absoluto y os lo he dicho, vosotros podéis detener todo esto. Toda la profecía, todo lo anunciado puede detenerse y cambiarse por un gran Bien, si vosotros detenéis vuestra vida de pecado, vuestra vida de maldad, vuestra vida de abandono a vuestro Dios, vuestra vida de adorar a otros ídolos. Vosotros sabéis lo que Me duele cuando adoráis a otros ídolos y esto es cuando os vais por otros caminos, que preferís otras cosas antes que a Mí, vuestro Dios. Habéis hecho ídolo de cada cosa de vuestra vida y Yo estoy a un lado, desaparecido de vuestra propia vida. Si vosotros cambiáis, si vosotros ponéis un hasta aquí, si vosotros empezáis a actuar en el Amor y en la virtud, todo se puede detener, se pueden aminorar los acontecimientos, se pueden detener los acontecimientos, pero todo depende de vosotros.

Entended, Mis pequeños, antes de que sea tarde, os vuelvo a hacer otro llamado, vuelve el Padre a salir al encuentro del hijo, ¿cuándo, cuándo entenderá el hijo?, ¿cuándo entenderéis vosotros, Mis pequeños, que ya estáis en los momentos culminantes de la historia en que todo se vendrá abajo?, se vendrá un cambio doloroso, que os quiero evitar, pero no entendéis.
El Padre siempre obrará para el bien del hijo, el hijo no entiende hasta que viene el dolor, hasta que sufre ó hasta que muere. Si la muerte llega, el dolor puede ser eterno. Tened cuidado, Mis pequeños, os quiero evitar grandes dolores y pérdidas de Mi Corazón, porque cada alma que se pierde y que se condena, es un gran dolor para Mí, vuestro Dios.

Os quiero evitar un dolor a vosotros y dolor a Mi Corazón, entended por favor, Mis pequeños, antes de que sea tarde. Os sigo llamando alrededor del mundo, sigo llamando a vuestro corazón, sigo tocando puertas, ¿cuándo Me abriréis?, ¿cuándo entenderéis?, ¿cuándo daréis la media vuelta y regresaréis por el buen camino?, ¿cuándo?
Gracias, Mis pequeños.