Del diario de Gabrielle Bossis

2. 23 de agosto. Se arregló el piano en forma de altar. Yo pensaba en las gaviotas, en los aviones que aterrizan en algunos barcos. El me dijo: "Por esta vez, el que viene es Cristo". 

3. Yo decía, viendo la agitación del mar: "Señor, Tú sabes que todo esto lo hago por Ti; entonces, ¿para qué Te lo digo?" El: "Es necesario que Me lo digas, porque a Mi Me gusta oírlo. Dímelo con frecuencia. ¿No es verdad que cuando tú sabes que alguien te quiere te gusta que te lo diga?" 

4. 2 de septiembre de 1936. En el Canadian Pacific, entre Brandon y Regina, me pareció que 
besaba el interior de Su Mano. Era Su Mano derecha. La Sangre salía con abundancia de la Herida; 
Sangre roja, viva y fresca, que salía casi a borbollones. Me pareció estar toda entera de-trás de esa Mano, de manera que nadie podía verme. Y mientras yo besaba la Mano, mis la-bios se sentían purificados. Yo habría querido que la Sangre me lavara toda. Me dijo: "Cree en la purificación 
infinita de Mi Sangre." 

5. 24 de septiembre. En Canadá. La Capilla queda a la puerta de mi aposento, y cada vez que paso, le sonrío. El me dijo: "Sonríeles a todos. Yo pondré una Gracia en cada una de tus sonrisas". 

6. 3 de octubre. En la región de Saskatchewan. El: "Enciérrame en tu corazón con una señal de la Cruz, como entre dos barrotes", 


7. 4 de octubre. En Montreal. El: "Cuando te falta recogimiento, el que sufre la privación Soy Yo". 
(Y esto lo dijo con suma delicadeza en la Voz). 

8. 25 de octubre. Cristo Rey. Esta mañana el sacerdote me consagró a Dios durante la Misa. Puso 
ml ofrenda en la palia, debajo de la hostia. Jesús me dijo: "Ocúpate de Mi Amor. No hay un 
huérfano que esté más desamparado que Yo..." 

9. Octubre, cerca de Quebec. Los niños habían terminado de cantar, y yo Le decía: "Ya no Te hablo 
nunca en música". El me contestó: "Mi música es tu amor". 

10. 3 de noviembre de 1936. A la hora de la Misa, en el barco que me traía de América. "Cree en la purificación infinita por Mi Sangre." 

11. 3 de noviembre de 1936. Regreso a bordo de "L'Ile de France". "No te detengas en los detalles. 
Ve hacia Mi Amor, con los ojos fijos. Si caes, levántate y mírame de nuevo." Con el pensamiento ponía yo mi cabeza sobre Su Hombro. Me dijo: "¿Me la das para siempre?" En otra ocasión me dijo: "Busco hambrientos." Yo: "Señor, dame la sed del martirio." El: "No quieras tener sino lo que Yo quiera ofrecerte." 

12. 4 de noviembre, al regreso. Ultima Misa, sobre el puente del barco. Distraída después de la comunión, oí que suavemente me decía: "Estoy esperando". 

13. Diciembre, en Francia. Por la calle. Yo: "Voy caminando a tu lado. El, dulcemente: "Pero no Me dices gran cosa". 

14. 13 de diciembre de 1936. En Francia. Nantes. Clausura de la novena en Nuestra Señora 
Inmaculada, bajo la presidencia de monseñor Villepelet. Durante la procesión, Jesús me dijo de nuevo: "Hija Mía". Y como yo advertí que mi vecino de la Avenida Launay llevaba el palio, dije a mi Señor: "Concédele alguna Gracia para su casa." Inmediatamente me respondió: "¿Acaso no vengo cada mañana?" Entonces recordé que en casa de ese vecino monseñor C. celebra la misa cada mañana. Entonces le di las gracias. 

" El y Yo",  Diario de Gabriela Bossis