Os puedo ayudar a alcanzar lo que ni siquiera imagináis

 Dios Padre a Javier Viesca, México, 2015 

 
Hijitos Míos, os pido ser prudentes y sabios para todo lo que se venga. Habéis sido preparados para estos momentos.
 
Hay millones de hermanos vuestros que no les interesa estar Conmigo, que no les interesa saber qué está sucediendo en lo espiritual. Ven cómo se convulsiona el Mundo, verán cómo los planetas se irán afectando también, todo se irá modificando.
 
Tendréis situaciones difíciles, afectarán la vida de muchos, muchos de vuestros hermanos ni aun así, se moverán al cambio, han cerrado su corazón.
 
Entended, Mis pequeños, vosotros, los que no queréis cambiar, vosotros, los que no estáis viendo la realidad espiritual que os rodea, entended que todo esto lo estoy permitiendo para vuestro bien, especialmente para vosotros, que estáis tan distraídos con las cosas del Mundo.
 
Habrá un momento en el que lloraréis no haber querido cambiar, cuando se os dio la oportunidad, porque muchos moriréis en pecado grave y no tendréis posibilidad de salvación. Ciertamente, Yo Me derramo sobre cada uno de vosotros, He hecho tanto, para que, cuando vierais todas las Manifestaciones Divinas que se dan alrededor del Mundo, os hicieran cambiar, pero ya las veis como cosa normal, ya no veis lo extraordinario que tenéis a vuestro alrededor día a día y, ciertamente, que al no ver lo que Yo os estoy dando para vuestro bien, tampoco Me lo agradecéis. Soy el Dios Desconocido, Soy el Dios Olvidado, Soy el Dios que ya no entro a formar parte de vuestra vida ni un segundo. Solamente, cuando tenéis problemas, es cuando aparezco, a veces, solamente ligeramente en vuestra vida, no con la fuerza en la que debiera Yo entrar en vuestro ser, porque no Me lo permitís. No os imagináis, Mis pequeños, lo que lograríais si Yo pudiera trabajar plenamente en vosotros.
 
Es como cuando erais pequeños, y aprendiendo las letras, no podíais hacerlas y venían, ya fuera vuestro padre o vuestra madre, os tomaban la manita con el lápiz y guiaban el trazo y, os salía perfecto.
 
Así quiero estar Yo en vuestra vida, tenéis que entender, como os he dicho tantas veces, que sois imperfectos, pequeños, que os falta mucho por crecer, pero Yo puedo entrar en vuestra vida, si Me lo permitís, Yo os puedo ayudar a hacer, lo que normalmente hacéis, pero en una forma perfecta. Yo tomaré vuestra mano, tomaré vuestros labios, tomaré vuestra mente, tomaré vuestro corazón, os tomaré plenamente y vosotros mismos sentiréis el cambio y os daréis cuenta de cómo, Mi Estancia en vuestro ser, os puede ayudar a alcanzar cosas, que ni siquiera os podéis imaginar. Ciertamente, os daréis cuenta que sois instrumentos de Mi Bien, gozaréis lo que haréis y Me daréis el crédito, aunque vuestros hermanos, quizá, no lleguen a saber, que Yo estoy en vosotros y os estoy ayudando en vuestra perfección. Será un secreto entre vosotros y Yo.
 
DejadMe, Mis pequeños, a que alcancéis una felicidad sublime, ya desde la Tierra, dejándoMe a Mí vuestro Dios, trabajar en vosotros, dejadMe lo difícil de la vida y empezaréis a gozar lo que es tenerMe a Mí, no solamente a vuestro lado, sino en vuestro interior, ayudándoos a hacer todo lo que tenéis qué hacer, en la misión que os he encomendado y lo que tenéis qué hacer en vuestras obligaciones diarias. Vosotros mismos os admiraréis de la perfección en que todo empezará a salir y los que estén a vuestro alrededor y los que reciban la Bendición de que Yo, en vuestra persona, pueda ayudarlos en algo, también lo gozaréis.
 
DejadMe, pues, Mis pequeños, que os haga felices a vosotros y a vuestros hermanos a través de vosotros.
Gracias, Mis pequeños.