Jesús: quiero santos extraordinarios

Jesús a Marga, Madrid, España


Mirad, no me conformo sólo con santidades «pasables», que cumplen con su deber ordinario… ¡quiero santos extraordinarios! Con heroicidad suma en todas sus virtudes.
 
Porque la Gracia que se os derrama y que circula ahora por la Iglesia, no tiene nada que ver con aquella de otros años.¿Cuándo se ha podido dar el derramamiento de la Profecía como ahora, en vuestros días? ¿Cuándo se ha podido comulgar con tanta frecuencia? ¿Cuándo tantas facilidades para ir a Misa? ¿Cuándo las Gracias Eucarísticas tan desbordadas desde la Custodia? Dime, ¿cuándo tanta proliferación de conferencias, charlas, oraciones, Ejercicios o Jornadas religiosas?

 ¿Cuándo tantas facilidades para ordenarse como ministro o entrar en un convento? ¿Cuándo tanta difusión de la fe en todas partes y por todo el mundo? 

Sin embargo, Yo me pregunto como tú, Marga: ¡¿Dónde están los santos de hoy?! Cuando Yo venga, ¡¿Encontraré fe sobre la tierra?! 

Mira que aquí hablaba de estos Tiempos. Mártires del siglo XX, ¿qué espera para el XXI? ¡Apostasía! ¡APOSTASÍA DE LA FE! Vida licenciosa. Olvido de las costumbres cristianas. Precisamente el derramamiento de mis Gracias y la poca correspondencia es lo que va a motivar sobre vosotros los Castigos. Persecuciones contra la fe… aquí sí muchos, muchísimos apóstatas. Apostatáis por lo más leve. ¿Qué no haréis cuando se os persiga? No…, este falso optimismo Yo no lo tengo. Yo Soy la Verdad.