Mons. Fellay: la situación de la Iglesia es catastrófica

Blog Panorama Católico Internacional (fragmento de la entrevista a Mons Fellay  (FSSPX) por Edward Pentin) 

Periodista: Dada la situación de la Iglesia hoy y el descontento que hay, ¿los ven a Uds. como los que vienen a rescatar a la Iglesia?
Mons Fellay: Algunos en Roma nos lo dicen. No usan la palabra “rescate” pero sí “ayuda”. Y definitivamente hay palabras en este sentido en el documento que nos han propuesto. No estamos inventando nada. Es que la situación de la Iglesia es catastrófica y continúa empeorando. Y ahora, finalmente, se oyen voces que empiezan a hablar, gente que se acerca a nosotros y ya no ve nuestra posición tan mal como solía. (Risas)
(...)
Periodista: para poner un ejemplo, sobre Amoris Laetitia, la Exhortación Apostólica, me imagino que un buen número de sus fieles del FSSPX no estará de acuerdo.
Mons Fellay: Bueno, ninguno de nosotros está de acuerdo.
Periodista. Pero entonces, ¿no hace esto más escéptico y reticente el acercamiento a un acuerdo para una comunión plena, o sea, ser regularizados?
Mons Fellay: Yo creo que si Ud. no tiene toda la fotografía a la vista le puede parecer loco hacer un acuerdo ahora. Va a ser un verdadero trabajo y tomará su tiempo llevar a los fieles a darse cuenta de que esta nueva etapa de la historia de la Iglesia conlleva una nueva realidad. Nosotros estamos inmersos en una realidad, tenemos que entenderla del modo más preciso que sea posible para actuar correctamente. Simplemente decir que no tomaremos decisiones porque las cosas están mal no es lo que Nuestro Señor pide a sus Apóstoles.
Periodista: Otro problema de ayer mismo, las mujeres diaconisas. Le pregunto lo que piensa de esto y si puede ayudar para que su gente lo respalde.
Mons Fellay: Esto no cambia el problema de fondo. Solo agrega otro elemento de confusión en la tragedia de la Iglesia. Es jugar con las palabras, tratar de aplicar hoy cosas que ocurrieron en el pasado pero no en del mismo modo que se las presenta ahora. Encontramos en la Sagrada Escritura, en San Pablo, que se habla de diaconisas, pero no era un ministerio sacramental y no tiene nada que ver con lo que se presenta ahora, sino con el servicio, la ayuda. Era un tiempo en que había una similitud con el servicio que se pedía a los diáconos, pero era algo de dos niveles distintos. El diácono tenía, y tiene hoy, naturalmente, el poder sacramental que las diaconisas de ese tiempo NO tenían. Es mezclar las cosas y traer más confusión.
Naturalmente toca puntos muy, muy delicados. Sabemos que los modernistas quieren habilitar a las mujeres al sacerdocio y al episcopado. Y esto es interesante porque Roma se tomó el trabajo de definir como un pecado contra la Fe el pretender que pudiese haber mujeres sacerdotisas u obispesas. Sostener esta posición implica quedar fuera de la Iglesia. La pérdida de la Fe.
Periodista: ¿Y no ve Ud. un propósito ulterior detrás de este tipo de propuestas? ¿Qué dice Ud.?
Mons Fellay: No necesariamente. No de parte del papa, porque como dije él no tiene una estrategia ideológica. Él tiene otra perspectiva. Claro que hay gente que sí tiene esta perspectiva ideológica y que buscará dirigir las cosas en esa dirección. Eso es muy claro.
Periodista: ¿Ud. cree que el papa lo escucha cuando se entrevistan?
Mons Fellay: Parece que lo hiciera, pero no quiere hablar de doctrina. De modo que hablamos de salvar las almas y de buscar caminos para esa salvación.
Periodista: La doctrina está en un segundo plano.
Mons Fellay: En su perspectiva, en lo que hace a solucionar los problemas, sí. Estoy muy convencido de esto.
Periodista: ¿Le preocupa que él quiera acercase a Ud. y convencerlo, como mucha gente piensa, para neutralizarlo, para acallarlo?
Mons Fellay: No es su perspectiva. Al contrario es alguien que ve como algo ventajoso tener controversias. El mismo es muy controversial. Y creo que nos quiere así para provocar una nueva situación que conduzca a una síntesis mejor. Por supuesto estamos en desacuerdo con esa perspectiva dialéctica, pero bien podría ser eso lo que explica su pensamiento. Aunque no lo aseguraría, no tengo elementos suficientes.
Periodista: Hoy es el día de Fátima. Como Ud. sabe, la Hermana Lucía y el Card. Caffarra han dicho algo de estos temas: que la apostasía vendrá desde lo más alto de la Iglesia. ¿Considera que hay algo que comentar sobre esto? (3)
Mons Fellay: No sabemos si esa cita está incluida en el texto del Tercer Mensaje. Hay un montón de reconstrucciones. Lo que es obvio es que no todo ha sido publicado. La Hermana Lucía, en su tercera memoria, cita palabras de la Santísima Virgen y luego ese escribe ese “etc.”. Lo que Roma publicó no son “palabras” sino una “visión”. Es obvio que algo falta. Ahora, ¿qué es lo que falta? Todos tratamos de reconstruir esta parte por referencias y citas de los que han leído el secreto.
Es muy interesante y yo solo puedo decir con certeza que alude a la Fe. El papa Benedicto, hoy cardenal Ratzinger lo ha dicho: habla de peligros sobre la Fe y la Iglesia, no es solo la visión. (4)Tenemos también el informe del P. Fuentes quien después de hablar con la Hermana Lucía pronuncia una conferencia muy impresionante y en la que puede estar reflejado no necesariamente todo el mensaje o el secreto pero la percepción que la Hermana Lucía tenía de este menaje. Y en ella alude a esta “desorientación diabólica” que por cierto está en lo más alto de la Jerarquía. Creo que es lo que tenemos ante nosotros.
Periodista: ¿Cómo cree que las cosas serán en el futuro? ¿Cual es su esperanza sobre el futuro?
Mons Fellay: La parte humana es muy difícil de describir. Yo diría que si Dios permite que esto continúe en manos humanas las cosas empeorarán más aún de lo que hoy podemos ver. Serán aún más confusas. El Papa Benedicto, en su libro “La Sal de la Tierra” describe la disolución de la Iglesia en pequeñas comunidades, como islas. Y sí, si Dios permite que las cosas que hoy vivimos sigan desarrollándose esta es la situación que vamos a enfrentar. Tendremos pedazos o lugares de catolicismo en el medio de un tiempo de abandono moral.
Periodista: Y lo principal es poner al hombre antes que a Dios.
Mons Fellay: Definitivamente. La Iglesia es divina, lo que significa que su misión es sobrenatural. Y si se la trata de descender por medios humanos, se la disuelve. Sabemos que no puede ser destruida, pero harán todo lo posible para lograr esa destrucción.
Periodista: Mons. Lefebvre hablaba de un eclipse de la Iglesia.
Es correcto. Eso es de La Salette. La Salette decía eso. Eclipse significa que algo está allí pero no se lo puede ver, al menos por un tiempo. ¿Permitirá Dios que las cosas lleguen tan lejos? Bueno, estoy seguro de que mucha gente se pregunta hoy dónde está la Iglesia. De modo que tal vez ya hayamos llegado tan lejos…