Si Soros pagó a obispos norteamericanos previamente a la visita de Fco. a EEUU, con la intención de que éste no incidiera en el aborto y la eutanasia en sus discursos, como así ocurrió, según ha desvelado Wikileaks, nos preguntamos: ¿es acaso Francisco un pelele capaz de ser influenciado hasta el punto de traicionar su cargo y perjudicar la defensa de los no nacidos? En este caso, demostraría que es incompetente para actuar como representante de Cristo en la Tierra.
Más plausible es la teoría de que Bergoglio está vendido a los enemigos de Cristo y actúa con sus mismas directrices empujando sus agendas ladinamente, a pequeños e imperceptibles pasos para la gran mayoría de católicos que no siguen los intrincados signos del “vicecristo", ya sea para bendecir, a través del prestigio moral del papado, la teoría indemostrable del cambio climático, la inmigración musulmana http://gaceta.es/noticias/soros-admite-detras-crisis-los-refugiados-03112015-0002 o restar importancia al aborto, como lo apoyan los siguientes hechos:
A continuación, un artículo del Catholic World News. Por Phil Lawler. 26 agosto 2016
¿Se aleja el Vaticano, bajo Francisco, de las enseñanzas de Juan Pablo II sobre la vida y el matrimonio?
La noticia central de CWN que ayer trató sobre los problemas con la guía de educación sexual emitida por el Consejo Pontificio para la Familia, arroja más luz, o tal vez debería decir, proyecta una sombra- sobre una historia que apareció a principios de este mes, sobre los nuevos nombramientos en la Curia romana.
El programa de educación sexual problemática fue preparado por el Consejo Pontificio para la Familia, encabezada por el arzobispo Vincenzo Paglia. El 14 de agosto, el Vaticano anunció que Francisco había nombrado arzobispo Paglia para convertirse en presidente de la Academia Pontificia para la Vida y en rector del Instituto Juan Pablo II para estudios sobre el matrimonio y la familia. En el pasado, estas dos oficinas-la Academia para la Vida y el Instituto Juan Pablo II- habían sido baluartes de apoyo al movimiento / pro-familia pro-vida. El doble nombramiento del arzobispo Paglia parece claramente una señal de cambio.
No sólo con el lanzamiento del programa de educación sexual el arzobispo Paglia ha molestado a los católicos más conservadores. El año pasado él organizó una serie de seminarios, previos al Sínodo sobre la Familia, con una lista de oradores fuertemente inclinados hacia la "propuesta Kasper" para permitir a los católicos divorciados vueltos a casar-recibir la comunión.
Francisco le dio algunas instrucciones públicas. Sin embargo carecieron, y fue llamativo, de declaraciones inequívocas sobre su preocupación sobre el aborto y la eutanasia, el divorcio y la anticoncepción, que los católicos esperarondurante el pontificado de San Juan Pablo II. Y recordemos que el arzobispo Paglia también desempeña el cargo de rector del Instituto Juan Pablo II institución. Hay que esperar también cambios que ahora están en la recámara.
Mons. Livio Melina, que se ha ganado el respeto internacional como Presidente del Instituto Juan Pablo II y como un enérgico defensor de las enseñanzas expuestas por San Juan Pablo II sobre el matrimonio y la vida familiar, ha sido reemplazado. (Mons. Melina fue franco en su defensa de la enseñanza tradicional de la Iglesia, sobre quienes se divorciaron y se volvieron a casar (católicos) no pueden recibir la Eucaristía, y que las declaraciones de Fco. recientes no cambian esa posición doctrinal.) El nuevo presidente es Mons. Pierangelo Sequeri, que fue descrito en el anuncio del Vaticano como teólogo, pero es mejor conocido como el autor de un popular himno italiano.
Ni estos nuevos líderes ni las instrucciones del Papa inspiran confianza en que el Instituto Juan Pablo II continuará promoviendo las enseñanzas del Pontífice polaco. Y desafortunadamente estos no son los primeros indicios de que la labor del Instituto y, más importante aún, las enseñanzas de Juan Pablo II-están siendo degradadas. Recordemos que el Instituto JP no estaba representado entre los participantes en la primera reunión del Sínodo de la Familia, y en la elaboración de Amoris Laetitia, el cual fue el resumen final de ese Sínodo, Francisco fue parco en sus citas de la enorme labor que Juan Pablo II había hecho sobre el mismo tema
Los nombramientos del arzobispo Paglia y Mons. Sequeri se anunciaron el 17 de agosto junto con el nombramiento de alto perfil del obispo Kevin Farrell, como el primer prefecto del nuevo dicasterio para los Laicos, Familia y Vida. En su cargo de obispo Farrell, Francisco dijo que la misión de la nueva oficina debe ser "cada vez más claramente inscrita en el horizonte de la misericordia", y se refirió a su imagen de la Iglesia como un "hospital de campaña" que debe servir sobre todo " las personas más amenazadas por la nueva cultura de la competencia y la eliminación. "pocos católicos estarían en desacuerdo con esa misión, confío. Sin embargo, hay una clara diferencia de tono entre Francisco, con sus quejas acerca de una "cultura de usar y tirar", y los Papas Juan Pablo II y Benedicto XVI, con su retrato sombrío de una "cultura de la muerte."
Diferentes líderes de la Iglesia utilizan diferentes retóricas, por supuesto, y un cambio en el tono no significa necesariamente un cambio en la política. Pero también es digno de mención que Francisco, en su discusión de las amenazas a la vida matrimonial y familiar, no habla de los males intrínsecos que fueron condenados en la Veritatis Splendor. (De hecho, esta encíclica-hito no se cita en Amoris Laetitia!) La pregunta-agudizada por estos nombramientos curiales clave, es si-Francisco está apartándose deliberadamente de las enseñanzas de San Juan Pablo II sobre el matrimonio, la familia y la vida.