Las perlas de Dios están en manos de un hombre abominable

Ven, (...) 

Sabes que siempre estoy dispuesto a hablarte si tú estás dispuesta a escucharme.

Pasan los días y parece que el cisma avanza en la Iglesia que Yo fundé. 
Ahora, más que nunca va a ser evidente quiénes Me siguen de verdad y quiénes se ocultan bajo apariencia de pastores de Mi rebaño, pero en realidad son agentes de Satanás, el cual por fin acaricia su sueño hecho realidad: que un miembro de la masonería haya conseguido escalar hasta el primer puesto, el de gobernador de la Iglesia de Jesucristo -su vicario-, el que debe dirigirla en poder y santidad hacia la Patria definitiva.

Pero ves que los frutos son bien distintos, incluso opuestos, pues el que ejerce de viceCristo en la Tierra no es más que un impostor que se da al mundo sin reconcer la grandeza de lo que trata: las perlas de Dios están en manos de un hombre abominable que pretende cambiarlas en excrementos del Infierno, porque así lo viene haciendo desde que tomó ilegítimamente el poder.

Pero Yo no Me voy a quedar callado, y ya otros hablan por Mi boca aleccionando al Pueblo de que la doctrina de Jesucristo no puede sufrir innovaciones ni modificaciones so pena de transformarse en una doctrina herética que nada tiene que ver con la Palabra de Dios.

Verás cómo más y más gente se va sumando en la defensa de la Verdad eterna que Yo vine a proclamar y serán los engañados los que no podrán soportar ser retados por ella, como Yo ya anuncié por medio de san Pablo.

Ámame, soy tuyo para siempre,


Yo, tu Jesús



Mensajes a un alma mística, noviembre 2016