Qué extraña historia la de la Orden de Malta en estos días. Una historia en la que vemos episodios dramáticos que surgen; con la impresión, sin embargo, de que se escapan muchos otros elementos, los más importantes, tal vez. (...)
El conocido periodista vaticano Marco Tosatti advierte que Boeselager fue respaldado por el Papa Francisco con una "impresionante violencia, que en un pontífice que es predicador de la misericordia, no puede dejar de sorprender".
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30 de enero de 2017 | De Christopher Lamb http://www.thetablet.co.uk/news
La designación de un delegado papal por Francisco significa que el Patrón (Burke) de la Orden está fuera de competencia.
El cardenal Burke está "en el cargo pero sin poder" su trabajo ha sido entregado al delegado papal
El más prominente crítico del Papa, el cardenal Raymond Burke (foto), ha sido despojado de sus responsabilidades después de que Francisco anunció que un delegado papal ahora gestionaría exclusivamente las relaciones entre el Vaticano y los Caballeros de Malta.
El Cardenal Burke es actualmente el Patrón de la Orden de Malta, cuya función principal es ser el representante personal del Papa para los caballeros y apóstoles de la Santa Sede.
Pero después de la saga entre la Orden y el Vaticano - que conduce a la renuncia del Gran Maestre de los Caballeros, Matthew Festing - el Papa ha decidido que su representante, por el momento, desempeñe el trabajo del cardenal Burke.
Significa que mientras que el cardenal Burke todavía está técnicamente en el cargo, está fuera del poder.
En una carta del 27 de enero dirigida al líder interino de la orden, Ludwig Hoffmann von Rumerstein, Francisco declara que el delegado será "mi único portavoz ... para todo sobre las relaciones de la orden con la Santa Sede" y esto continuará hasta la elección de un nuevo Gran Maestro.
El delegado debe colaborar estrechamente con Hoffman asegurando una "renovación espiritual y moral del orden" con un enfoque particular en aquellos caballeros que han hecho votos religiosos de pobreza, castidad y obediencia.
Es esta élite cuasi monástica que ocupa los puestos de liderazgo de la organización mundial y elige a su líder. Pero fuentes dentro de la orden dicen que los procesos de formación para los profesos no eran suficientemente sólidos con preguntas sobre la calidad de la vida religiosa entre este grupo de caballeros.
La decisión de Francisco de poner a su delegado a cargo del trabajo de renovación deja al margen al cardenal Burke, ya que otro elemento del trabajo del patrono es "promover los intereses espirituales de la Orden".
El sábado, el consejo soberano de los caballeros aceptó formalmente la renuncia de Matthew Festing, tras una amarga batalla pública entre la Orden y el Vaticano por el despido de un caballero alemán de renombre, Albrecht von Boeselager.
Festing, con el apoyo del cardenal Burke, despidió y suspendió a von Boeselager por la participación en la distribución de condones y afirmó que la acción disciplinaria estaba de acuerdo con los deseos de la Santa Sede.
Pero las cartas revelaron que el Papa nunca pidió que se tomara tal medida y provocó una investigación del Vaticano sobre el asunto. (...)