No tengáis pereza hacia vuestros compromisos espirituales

3 DE MARZO DE 2017. Haced lo que él os diga, blog


Amadísimos hijos de Mi Corazón. Mi amor por vosotros no lo podréis medir nunca en esta vida porque es infinito. Yo, Jesús, os hablo.

Pero tampoco podréis medir en esta vida el odio que os tiene Mi enemigo mortal, porque él desea vuestra perdición a costa de lo que sea. Por eso hijos, arrimaos a Mí, a Mi Corazón, consagraos a Mí o a Mi Santa Madre cuyo amor es inmenso, y tratad de no seguirle el juego al Maligno que lo que desea es encenderos en furia para que pequéis cuantas más veces mejor. El mal hijos existe lo mismo que existe el bien, pero tanto el mal como el bien vosotros sois los que lo hacéis. Mi Santo Espíritu os induce al bien y el Maligno al mal, pero vosotros seguís más al espíritu del mal que al Espíritu divino que trata de guiaros por caminos de amor y de paz. Yo, Jesús, os hablo.

Venceos en pequeñas batallas para que os podáis vencer luego en batallas más grandes. ¡Cuánto os duele alguna palabra que os dijeron negativa y os afectó tanto a vuestro amor propio! No os preocupéis del concepto que tengan de vosotros, Yo Soy quien sabe de verdad como sois y vuestras intenciones, y lo mismo que muchos pueden creer que sois perfectos Yo también sé si lo sois o no. Por tanto, caminad en paz por las sendas de Dios, sin importaros los pensamientos negativos e ideas nefastas que os mete el enemigo mortal de las almas, que no desea más que vuestra ruina eterna. Hijos, es una lucha perpetua, mientras viváis la vais a tener constantemente, pero también os digo que la oración en las debidas disposiciones, los sacramentos, la devoción a Mi Santa y querida Madre, el rezo de su Santo Rosario, son armas que vencen a Satanás y que él odia inmensamente. Yo, Jesús, os hablo.

No tengáis pereza de cumplir vuestros compromisos espirituales, sé que muchos estáis cansados, sé que a muchos os cuesta cumplirlos, pero no dejéis de hacerlo, porque así vais venciendo cada día más y eso molesta al demonio que desea que cada día vayáis dejando solapadamente vuestros compromisos hasta que no hagáis ninguno. 

Hace frio y os cuesta ir a Misa, pero hijos, vosotros que cumplís con vuestros trabajos, que lleváis a vuestros hijos a las escuelas haga o no haga frio, debéis también de hacer lo mismo con lo que Me habéis ofrecido cada día y no dejar ni uno solo, a no ser por fuerzas mayores que impidan cumplir esos compromisos de vuestra vida espiritual que os benefician tanto y que os ayudan a crecer en santidad.  Se inicia ya la Cuaresma y debéis de tener una Cuaresma santa, procurad cumplir exhaustivamente todo lo que os habéis propuesto, por eso, os pido que no os propongáis cosas tan fuertes que luego no podáis cumplirlas y os cree un malestar de conciencia. Yo, Jesús, os hablo y os instruyo.