María habla del gran cisma que dividirá la Iglesia

Mi Inmaculado Corazón triunfará. A Agustín del Divino Corazón
Enero 8/10 

Hijos carísimos: Mi Inmaculado Corazón triunfará sobre este mundo hedonista y materialista, mundo salido de los cánones de Dios, mundo que corre a una velocidad vertiginosa que los llevará al despeñadero.


Mi Inmaculado Corazón triunfará sobre esta Iglesia fragmentada, oscurecida por la masonería, dividida por neo-corrientes y pensamientos que sustraen de la verdad.
Mi Inmaculado Corazón triunfará sobre el hombre impío, hijo de la perdición que llevará al caos, a la muerte espiritual a muchas almas, almas de fe endeble, tambaleante.


Mi Inmaculado Corazón triunfará sobre el gran cisma que dividirá la Iglesia, cisma que conducirá a la confusión y relajación religiosa, cisma que llevará a la desobediencia de la autoridad infalible del Papa, cisma que llevará al

enfrentamiento de cardenales contra cardenales, obispos contra obispos, sacerdotes contra sacerdotes, fieles contra fieles; cisma que atacará la doctrina sana y al Magisterio de la Iglesia, cisma que querrá arrasar con todo lo que se llame tradición, cisma que oscurecerá la Iglesia sumergiéndola en densas tinieblas, cisma que hará de algunos jerarcas y prelados de la Iglesia: herejes y anatemas; cisma que ya se está gestando en el interior de la Iglesia, cisma que converge a la masonería eclesiástica, masonería que ha creado un plan maestro para destruir la Iglesia. Plan siniestro salido de los abismos del infierno que llevará a la Iglesia a la gran hecatombe; hecatombe en la que muchos perderán la fe, hecatombe en la que muchos no sabrán diferenciar la falsa iglesia de la verdadera Iglesia, hecatombe en la que muchos adorarán al falso cristo, hecatombe que llevará a la Iglesia al más completo abandono y a la más terrible desolación.

Mi Inmaculado Corazón triunfará a pesar de la infidelidad de algunos hijos predilectos, hijos que no someten su sacerdocio ministerial bajo mi protección Maternal, hijos que no saben perseverar, aceptar el peso de la cruz en el momento de la prueba, hijos que abren puertas a la tentación y por eso colapsan, pasan al bando de los desobedientes, de los impíos.

Mi Inmaculado Corazón triunfará a pesar de los baches por los que ha pasado la Iglesia a través de la historia.
Mi Inmaculado Corazón triunfará porque el bien prevalecerá sobre el mal, satanás y sus secuaces serán derrotados en este final de los tiempos.

Mi Inmaculado Corazón triunfará, las almas víctimas serán pequeños pararrayos del Pararrayos que es Jesucristo, Víctima Divina.

Mi Inmaculado Corazón triunfará: el ejército de la bestia negra y el dragón rojo serán debilitados.


Mi Inmaculado Corazón triunfará: la Eucaristía es la máxima de las manifestaciones de Jesús en la tierra, el mundo se volverá Eucarístico, girará en torno del altar.

Mi Inmaculado Corazón triunfará: la humanidad entera me amará, sentirá la necesidad de mi protección e intercesión Maternal.


Mi Inmaculado Corazón triunfará porque después de la horrorosa crisis de la Iglesia, profetizado por mí en la Salette, entrará en la era de la paz, era en la que el sacerdote será llamado: hermano sacerdote, el obispo: hermano obispo y el Papa: hermano Papa.

Mi Inmaculado Corazón triunfará: la consagración abreviará el tiempo de tribulación que estáis viviendo, adelantará los acontecimientos para que pronto veáis abrir las puertas de la Nueva Jerusalén.


Mi Inmaculado Corazón triunfará porque veréis descender del cielo a una mujer vestida de sol, parada sobre la luna con corona de doce estrellas. Doce estrellas que hacen referencia a las doce tribus de Israel, pueblo elegido por Dios para preparar la venida del Hijo de Dios. Doce estrellas que hacen referencia a los doce apóstoles que fueron el fundamento sólido para la edificación de la Iglesia. Doce estrellas que hacen, también, referencia a los apóstoles de los últimos tiempos, apóstoles consagrados por entero a mí, apóstoles formados en mi escuela maternal.

Mi Inmaculado Corazón triunfará porque el tiempo se ha cumplido, os aproximáis al retorno glorioso de Cristo.

Mi Inmaculado Corazón triunfará porque tengo a mi servicio soldados del Ejército Victorioso, soldados que difundirán la consagración a mi Corazón Maternal y el Apostolado de Reparación. Reparación tan necesaria en este tiempo de tribulación, tiempo en el que todo tendrá que cumplirse.