Pocas almas serán tomadas para el Nuevo Mundo

A Javier Viesca, México. Mayo 2017(...) 

No quisisteis hacer caso a Mis Palabras, no quisisteis hacer caso a Mi Evangelización, que os iba a colocar en un nivel muy alto espiritual y al vivir, según Mi Evangelización, que es la Perfección Divina, ibais a poder vencer la maldad de satanás, quien os ha inoculado de su mal, de su pecado y, vosotros, ahora vivís en esa soberbia, por la cual, él, perdió el Reino de los Cielos.

Sí, Mis pequeños, vivís en una gran soberbia, os sentís mejores que Yo, vuestro Dios, creéis que no Me necesitáis y, cuando os dais cuenta de todo lo contrario, de la realidad Divina, ya es demasiado tarde, porque la conocéis cuando morís.

Mis pequeños, viene ya, y se acerca a grandes pasos esta Purificación que os estáis ganando por vuestra negación al Amor, por vuestra negación a vivir en las Enseñanzas que se os dieron, Enseñanzas Divinas. Yo, vuestro Dios, Maestro en la Palabra, Maestro en Mis Obras, Maestro en el Amor y no quisisteis ser seguidores de las Enseñanzas que se os dieron. 

Vosotros, también habéis vivido esos momentos de impotencia, en los cuales, quisisteis hacer algo grande y por la negligencia de vuestros hermanos, no fructificó lo que vosotros queríais darles. Se siente uno muy mal, cuando la gente no responde y sólo queréis darles y hacerles un bien, pero no responden y eso es lo que sentís vosotros, pero a un nivel humano y quizá, solamente, queríais evangelizar una o dos personas. Entended que Yo vine por millones de personas y no solamente las del momento, sino, por toda la Creación humana, del pasado, del presente y del futuro.

Ese fue un sufrimiento muy grande en el Huerto de los Olivos, ver, cómo, para tantas almas, Mi Presencia en la Tierra, no les iba a ayudar en nada.

Vosotros habréis querido, alguna vez, hacer un bien y quizá hasta querer imponerlo para que no sufrieran vuestros seres queridos, pero ellos no responden ni os lo agradecen. Yo lo Vivo día a día, y la Creación, es así. Sigo esperando, en la Santa Misa, alrededor del Mundo, la presencia de todos y los templos e iglesias no se llenan, unos cuantos van, ¡cuando Yo, Me di por todos, no por unos cuantos! ¿En dónde está vuestro agradecimiento?

No Me tomáis en cuenta, no tomáis en cuenta Mi Sacrificio y, precisamente, se manifiesta ahí, en que no hay agradecimiento de vuestra parte. ¿Quién se acuerda, siquiera, de un, “buenos días”, unas “buenas noches”, cómo estás, Mi Jesús, cómo estás, Mi Salvador, cómo está Mi Dios? Yo también tengo Vida, Yo también siento, Yo también sufro, también Me alegro con aquellos que sí Me toman en cuenta, pero es muy desproporcionado el número de aquellos que no se acuerdan de Mí, que de aquellos que sí están Conmigo.

Os acordáis, solamente, cuando estáis sufriendo, entonces, Mi Santo Espíritu os indica que os puedo ayudar, que puedo lograr el Milagro y, es cuando os acercáis a Mí. Os ayudo, con la intención de mover vuestro corazón hacia la conversión y, a partir de ahí, que toméis un nuevo caminar, una nueva vida Conmigo, pero, no. Muy pocos, muy, muy pocos, después de haber recibido un favor grande de parte Mía, y reconociendo, claramente, que se realizó un Milagro, como en aquellos tiempos, su corazón queda tocado en Mi Amor y cambian y regresan y, ciertamente, Me alegro, pero, ¿cuánto tiempo les dura ese cambio?

Recordad que, además de Dios, Soy Hombre y esa parte humana Me duele mucho, pero la parte Divina, sufre más, porque, así como Soy, Omnipotente, Omnipresente, también, Mis Dolores, son inmensos.

Cuando digo Omnipotente, abarco todo, toda la Creación, al Universo entero y eso, vosotros no lo meditáis.

Vosotros, quizá, sufrís ataques de una o dos persona a vuestro alrededor, problemas familiares, problemas del trabajo o de la sociedad, pero son unas cuantas personas que, en algún momento, os puedan hacer daño o que os causen un problema. 

Con lo que os acabo de explicar en Mi Omnipotencia, imaginad, cuántos miles de millones de almas, día a día, Me causan Dolor con sus pecados, con sus olvidos, con su negligencia, con sus malos tratos. Son dolores inmensos, Mis pequeños, y ¿cuántas almas hay que reparen, que Me digan una palabra dulce, bella, amorosa, que Me traten como Hermano, como Padre, como Hijo, como Dios?

Son muchísimas más las almas que Me atacan, que aquellas de las cuales recibo un bien.

Sodoma y Gomorra fueron destruidas, porque la maldad había aumentado mucho, todo era pecado ahí. Prácticamente, no había alma buena, alma por la cual pudiera, Yo, evitar el destruirlas y, lo sabéis. Satanás os ha llevado, poco a poco, a vivir, nuevamente, otro Sodoma y Gomorra mundial y Universal.

Poco a poco os fue llevando a una destrucción espiritual, Mis Enseñanzas fueron tomadas por muy pocas almas y son las que se salvarán. Os gusta vivir más en la maldad, en el error, en los vicios, en el tormento espiritual y, esto, es muy tonto de parte vuestra, porque ¿a quién le gusta vivir en los problemas?, y vosotros mismos os los creáis, al estar apartados de Mí.

Entended, Mis pequeños, que Yo os vine a facilitar vuestra existencia. Vivíais en la obscuridad, vivías en la maldad, con la cual, satanás había corrompido todo. Os vine a traer la Verdad, la Luz, os vine a mostrar el error, en el cual, vivíais y, que los mismos fariseos y escribas os enseñaban. Ellos mismos os llevaban hacia el error, porque no estaban Conmigo tampoco, vivían para satanás. Sí, vivían, aprovechándose del pueblo, robándole a su mismo pueblo, utilizando las leyes, solamente, a su favor. Error que se sigue dando hasta estos momentos de vuestra existencia. Satanás os sigue atacando de la misma forma que lo hacía antiguamente y seguís sufriendo, porque no quisisteis hacer caso.

Os repito, os traje la Luz, os traje todo lo necesario para que fuera vencido satanás, para que, vosotros mismos, al uniros en las Enseñanzas que os dejé, satanás fuera vencido y Mi Reino se diera en la Tierra, y vivierais, como se vive en el Cielo. Pero Mis Palabras, Mis Enseñanzas, Mi Ejemplo de Vida, los Milagros que realicé, no hicieron mella en los corazones, solamente unos cuantos fueron tocados por Mi Amor y, Yo no vine por unos cuantos, vine por todos. 

Aquellos que no Me siguen, aquellos no Me aman, aquellos que Me rechazan, aquellos que se burlan de Mí, aquellos que quisieran que muriera, nuevamente, en la Cruz, son los que no han abierto su corazón, no han respondido a Mi Donación, no hay Amor en su corazón y no tienen Amor para con sus hermanos.

Yo os traje todo un modo de vida para destruir el pasado, saturado de la maldad de satanás, y empezar una nueva forma de vida, la del pueblo de Dios. Sí, se debió haber formado ese pueblo de Dios, con todo lo que Yo os di, pero no quisisteis tomar Mi Vida y Mis Enseñanzas para vivir en la perfección, si las hubierais tomado, no estaríais viviendo como ahora vivís: oprimidos, sufrientes, maltratados, adoloridos por tanto mal que hay a vuestro alrededor y sin posibilidad de hacer algo, en lo humano, para cambiar con todo lo que os oprime. Y, os he dicho que, humanamente, ya nadie os podrá ayudar a mejorar lo que ahora estáis viviendo en toda la Tierra; satanás, se ha adueñado ya, de todos los poderes de toda la Tierra, y por eso, estáis sufriendo por todos lados.

Pero os he dado la solución para tener un cambio total, que es el regresar a Mí, es el orar, es el vivir de acuerdo a las Enseñanzas que Yo os di, es,  el unirse, todos, en la oración y, especialmente, en la Misa y el Santo Rosario. Ese es vuestro poder actual, la vida en la Gracia y en la oración, las Virtudes que Yo os enseñé y que las viví, para que aprendierais. Pero se os hace anticuado y aburrido, y si seguís pensando así, vuestro dolor aumentará. Estáis apenas, empezando a sentir el ataque grave de satanás, todavía, no habéis vivido lo más fuerte de su ataque. Se está burlando de vosotros ante Mi Presencia, lo veo a él, pisándoos a todos vosotros, sí, estáis bajo sus garras.

Vosotros mismos permitisteis que hiciera esto con vosotros, no quisisteis vivir en la Luz y vivir en la libertad del Amor y, en cambio, os dejasteis encadenar en la maldad, en las pasiones, en el robo, en la mentira, en todo aquello que ahora estáis viviendo y que os está oprimiendo, pero no hacéis nada, os quejáis, pero seguís permitiendo en vuestra vida la maldad que tenéis a vuestro alrededor. Y las iglesias siguen vacías, la oración sigue olvidada, todas las muestras de Amor que Yo os di y que Mi Madre os ha enseñado, ¿de qué han servido?

Tenéis todas las armas espirituales necesarias para vencer a satanás y no las tomáis, porque se os hacen obsoletas y aburridas y, por vuestra falta de Sabiduría, seguiréis así, sometidos por el mal.

Pensando en la forma en que vivís y actuáis, os puedo asegurar que, vuestro sufrimiento, cada vez, va a ser peor. Estáis esperando, como los antiguos judíos, vuestro Salvador, que venga a luchar por vosotros, que os salve y, vosotros, no moveréis ni un solo dedo. Queréis todo fácil, no queréis luchar por vuestro bien, se os consintió demasiado y no quisisteis responder por el bien y con el bien que se os trataba.

Vosotros mismos os estáis ganando esta Purificación, que ya empezó para vosotros, y es en el sufrimiento cuando responderéis, pero va a ser el dolor el que os haga reaccionar, el que os haga voltear vuestra cara hacia Mí, pidiendo ayuda y perdón. No quisisteis vivir en el bien cuando lo pudisteis haber tenido y sin sufrir, ahora, sufriréis para ganarlo.

Desperdiciasteis tantas oportunidades de Amor que se os dieron, tantos llamados de parte Mía y de Mi Madre Santísima y os tapasteis los oídos. Vuestra tontería, os va a llevar a un gran dolor.

Pocas almas serán tomadas para iniciar un Nuevo Mundo y, la gran mayoría, será eliminada de la Tierra. Eso os ganasteis por no haber vivido en Sabiduría Divina. La soberbia os venció, creísteis que vuestra inteligencia era mayor que Mi Sabiduría y pronto os daréis cuenta de que no es así. Vuestra soberbia os va a ahogar en el dolor.

Os pudisteis haber ahorrado todo el sufrimiento que padeceréis, no quisisteis ver lo que Yo os mostraba cuando os profetizaba vuestro futuro, que lo tenéis en las Sagradas Escrituras, pero ¿cuántos abren el Libro Sagrado, para alcanzar su perfección?, prácticamente, nadie.

Se os consintió, se os dio todo para ser grandes, para ser perfectos, para tener un alma a la altura, casi, de las almas del Cielo y lo hicisteis a un lado. Toda esa Enseñanza Divina la despreciasteis y preferisteis, solamente, la experiencia humana.

Todavía hay tiempo para que aminoréis los acontecimientos tan fuertes que se os vendrán, ciertamente, podríais detener mucho de vuestro sufrimiento si meditarais estas Palabras que os digo y que os he venido diciendo desde hace tiempo, pero, desgraciadamente, no creéis en ellas, y será demasiado tarde, cuando las aceptéis.

Soy vuestro Dios, fuisteis creados en el Amor, fuisteis creados para amarNos y para ser amados por Nosotros. Teníais un futuro bellísimo, pero lo despreciasteis, era tan fácil vuestro futuro, era vivir en el Amor, llenaros de Mi Amor y transmitirlo a vuestros hermanos, pero preferisteis el mal. Me duele tanto, Mis pequeños, siempre heMos buscado vuestro bien, pero, vosotros, habéis preferido vivir para el enemigo, para vuestro enemigo. Todo el mal que llega a vuestra vida, viene de él y, tontamente, lo seguís buscando. Eso, es estupidez humana, seguir a aquel que os está dañando.

Nosotros, en Nuestro Amor, os estábaMos dando y prometiendo una vida llena de felicidad, con solo ser obedientes a Nuestras Enseñanzas pero, vosotros, preferisteis seguir las enseñanzas de vuestro propio enemigo, preferisteis vivir en la maldad que él os enseñaba y que, con esa maldad, sufrís y, aun así, le seguís.

Es incomprensible, meditadlo, Mis pequeños, es incomprensible, cómo, si queréis lo bueno, vivís en lo malo. Pero, el dolor, os va a hacer cambiar de opinión. Desgraciadamente, la gran mayoría, no se salvará, además sufriréis y mucho.

Los que han entendido lo que es Mi Amor y lo han seguido, manteneos en él, Mis pequeños, vosotros, tendréis una purificación, mucho más leve, amorosa, sencilla, porque, vosotros, ya tuvisteis dolor y persecución de aquellos hermanos vuestros que, viviendo a vuestro alrededor, no os aceptaban, porque habíais escogido la mejor parte. Ahora, en estos momentos de dolor, seréis protegidos. Estáis en Mi Corazón y en el de Mi Madre, no os preocupéis, vuestra purificación será leve y rápida. 

Os amo, Mis pequeños, manteneos Conmigo, que Yo ya estoy con vosotros y gracias, Mis pequeños, los que tomasteis como modo de vida Mis Enseñanzas y Mi Amor, gracias por darMe el amor que, la gran mayoría de vuestros hermanos, no Me han dado.

Gracias, Mis pequeños.