Fuera de la verdadera Iglesia, la Católica, no hay salvación. Sostener lo contrario, sería tanto como afirmar que Jesucristo, al fundar la Iglesia, hizo una obra completamente inútil; decir que todas las religiones son buenas, sería un absurso manifiesto, puesto que dos creencias opuestas no pueden ser a la vez verdades.
Así como nadie se salvó fuera del arca de Noé, así también nadie se salva fuera del arca de salvación que es la Iglesia de Jesucristo.
Sin embargo, el que cree de buena fe estar en la verdadera Religión y observa la ley de Dios, tal como la conoce, y no ha cometido pecados mortales o, si los ha cometido, tiene de ellos verdadero arrepentimiento, podrá salvarse porque pertenece en realidad al alma de la Iglesia Católica. Lo mismo puede decirse del pagano que observa la ley natural: Dios y su gracia no le faltarán, y es de creer que será conducido por lo menos al Bautismo de deseo que le proporcionará la justificación y la salvación.
¿Quienes están fuera de la Iglesia?
Están fuera de la Iglesia: los infieles, los herejes, los cismáticos, los apóstatas y los excomulgados.
¿Son cristianos los miembros de las sectas protestantes?
No. Esos son falsos cristianos, llamados herejes o cismáticos por que niegan la autoridad de la Iglesia establecida por Jesucristo para enseñarnos la verdadera Doctrina Cristiana.
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