Se acerca la Navidad y ya caen sobre nosotros las peticiones caritativas propias de las fechas.
Si hace unos días UNICEF quería obtener de mi marido un donativo vía telefónica, supuestamente para los niños pobres, hoy en SUPERCOR, un amable joven pretendía captarme para un ingreso económino destinado a los niños refugiados. Después de decirme él que ACNUR estaba vinculada con la Naciones Unidas, le he contestado que yo no compartía la ideología abortista de la ONU.
Es decir, cuidado a quién damos nuestro dinero y si bien las Hermanitas de los Pobres merecen nuestra confianza, cualquier ONG, incluida CARITAS* que apoya la invasión globalista musulmana o Caritas Internationalis que colabora con foros que promueven la homosexualidad** deben desdeñarse.
Otras fundaciones caritativas, aunque no destinen sus fondos a cooperar con tramas abortistas y de ideología de género como las vinculadas a las Naciones Unidas, gastan en buroracia y sueldos una parte poco desdeñable de los donativos.
Por el contrario, hay que premiar con generosidad a las parroquias que tratan a Nuestro Señor con reverencia, mantienen los ornamentos limpios y no maltratan la Eucaristía con los llamados ministros extraordinarios, hablan sobre la Confesión y la facilitan, y dejan claras las condiciones para comulgar.
* ni-un-euro-a-caritas-entidad-globalista-caballo-de-troya-de-los-islamistas/
** Caritas Internationalis se encuentra en la mesa directiva del Foro Social Mundial, organización cuyos miembros y eventos promueven ideas pro-comunistas, pro-homosexualidad y pro aborto. Caritas I tienen una fuerte presencia en el World Social Forum, está en su cuerpo de gobierno y estuvo presente, al menos en el meeting de 2013 de WSF.
El ex presidente de Caritas Internationalis fue el cardenal hondureño Óscar Andrés Rodríguez Maradiaga, uno de los más cercanos asesores del Papa. Hoy lo es otro jerarca liberal, Tagle, de Filipinas