Un cardenal le grita al "Papa"


https://www.marcotosatti.com/2017/12/01/vaticano-una-notizia-ambigua-unindiscrezione-e-una-voce-che-speriamo-non-sia-confermata-su-mons-gaenswein/

Después de la noticia de la publicación de la carta de Bergoglio a los obispos de Buenos Aires felicitándoles por abrir la puerta a la comunión sacrílega a los adúlteros, en el Acta Apostolicae Sedis, 10/2016, Tosatti escribe:


La noticia no puede más que alimentar ulteriormente la confusión y la incertidumbre alrededor de la controvertida exhortación apostólica, y al modo de actuar del Pontífice. Que aparece, una vez más, lejos de la claridad y de la integridad que muchos fieles esperan. No se da una respuesta a los cardenales de la Dubia, no se da respuesta a cartas, peticiones y otras iniciativas de estudiosos, teólogos y simples fieles desorientados por la querida ambigüedad del documento. 


Pero al mismo tiempo se ofrece una pátina de oficialidad a una carta dirigida a un miembro de una conferencia episcopal. ¿Con qué objetivo? ¿Para obligar en todo caso, a todos, a un religiosum obsequium de un magisterio expresado, sin embargo, en formas oblicuas y ambiguas, o para contestar sin comprometerse en una respuesta directa que el Pontífice expondría de manera inequívoca, a los dudosos y a los perplejos? Como simple fiel, la sensación que todo esto da es de un fastidio hacia un comportamiento que se pudiera definir como un pretexto, en el sentido peor del término. 


Y, si es verdadero cuanto hemos sabido de dos fuentes diferentes, quizás también sea un problema compartido en el Vaticano. 

Un cardenal de gran renombre, ex diplomático, y con un currículo importante en la guía de Congregaciones y despachos de relieve en la Secretaría de Estado, le habría reprendido al papa por su acción, diciéndole en última instancia:  Te elegimos para hacer las reformas, no para destrozarlo todo. 


La noticia se ha esparcido en Vaticano porque la conversación, si de conversación se puede hablar, se ha desarrollado a niveles elevados de decibelios, que han superado la frágil barrera de las puertas y los muros. 

El purpurado en cuestión fue uno de los que sustentó la candidatura de Jorge Mario Bergoglio en el cónclave del 2013.  

Actualización de en.news:

El prelado pertenece al grupo de los cardenales que en 2013 votaron por Bergoglio. Un análisis de la lista de participantes en el cónclave de 2013 muestra que el cardenal que probablemente participó en este incidente es Leonardo Sandri, de 74 años, Prefecto de la Congregación para las Iglesias Orientales.