https://www.lifesitenews.com/news/italian-catholic-university-drops-researcher-for-signing-filial-correction
Investigador de una universidad católica italiana sacado después de que firmó 'corrección filial'
MILAN, Italia, 15 de enero de 2018 (LifeSiteNews) - Dos signatarios de la Corrección Filial han sido castigados por mencionar su relación con una universidad católica junto a sus firmas, y uno ha sido descartado como investigador externo.
El reportero del Vaticano Marco Tosatti informó la semana pasada que había recibido un correo electrónico de uno de los signatarios asociados con una universidad católica en Milán.
No nombró a estos eruditos, pero la Corrección Filial lleva los nombres de cuatro señores de la Universidad Católica del Sagrado Corazón (Universidad Católica del Sagrado Corazón) en Milán: el Dr. Ettore Gotti Tedeschi, profesor de ética; El Prof. Massimo de Leonardis, profesor y director del Departamento de Ciencias Políticas; El Dr. Giuseppe Reguzzoni, un investigador externo; y la Prof. Andrea Sandri, investigador asociado.
En el correo electrónico, que Tosatti reimprimió con algunas notas, el firmante indicó que tanto él como otro erudito habían recibido advertencias de la Universidad Católica de Milán en noviembre diciendo que habían empleado mal sus títulos académicos y educativos colocándolos junto a sus nombres en la Filial Corrección. Los títulos, afirmó la Universidad, deberían usarse sólo en un contexto académico.
"Obviamente, la justificación es un pretexto jesuítico", escribió el signatario. "Quiero verlos dirigirse a todos los bufetes de abogados en Milán en los que prominentes abogados mencionan en sus placas de bronce sus alianzas con la [Universidad] Católica".
La corrección filial, entregada al Papa Francisco el 11 de agosto de 2017, expresó la preocupación de los teólogos católicos de que el pontífice había propagado posiciones heréticas sobre el matrimonio, la vida moral y la Eucaristía. Estas posiciones, advirtieron, están causando más "herejías y otros errores" que se extienden por toda la Iglesia Católica.
Los eruditos, investigadores y académicos católicos de una serie de campos fueron los primeros cuarenta signatarios de la Corrección filial. Más tarde, otros especialistas católicos agregaron sus nombres al documento. Esta fue la primera advertencia a un pontífice viviente desde la Edad Media.
El firmante le dijo a Tosatti cómo había descubierto a principios de diciembre que había sido eliminado de la lista de colaboradores, lo que significa que, a pesar de lo que le habían dicho verbalmente, no se le otorgaría un contrato en los próximos meses.
El investigador proporcionó a Tosatti pruebas textuales de que la Universidad Católica le había otorgado el título de "investigador externo" y lo incluyó en una lista previa de colaboradores. Dijo que ni él ni su compañero signatario habían recibido ningún contacto personal.
"Incluso están borrando de la página web [de la Universidad], tanto para mí como para [X], ¡el registro de nuestras actividades pasadas!", escribió.
Ambos signatarios han tomado consejo legal.
El escritor del correo electrónico le dijo a Tosatti que un amigo con conexiones con el Vaticano había sugerido que los gestos hostiles de parte de la Universidad Católica podrían haber surgido de la Santa Sede.
"Una de mis fuentes, de los círculos del Vaticano, ha sugerido que toda la iniciativa podría haber comenzado no tanto directamente desde la Oficina del Rector, sino desde un cardenal conocido de la Curia Romana, de cuyo dicasterio dependen en última instancia las universidades católicas. "
El profesor Claudio Pierantoni, académico de patrística y profesor de filosofía medieval en la Universidad de Chile en Santiago, escribió en un artículo en septiembre que una "persecución oficial" de fieles católicos comenzó ya bajo el pontificado de Francisco.
"El castigo oficial de un pensador católico por el único delito de defender una doctrina ortodoxa", escribió el profesor Claudio Pierantoni, significa el "comienzo de la persecución oficial de la ortodoxia dentro de la Iglesia", dijo. Pierantoni se refería específicamente al Dr. Josef Seifert, quien había sido expulsado de una universidad católica en España por el arzobispo Javier Martínez Fernández después de plantear algunas preguntas sobre la Exhortación Amoris Laetitia del Papa en 2016.
Acerca de su propia destitución, Seifert dijo que señaló lo que llamó una "Inquisición desordenada" que está sucediendo en la Iglesia que apunta y persigue a los católicos ortodoxos por no afirmar la "ética situacional" que la Iglesia siempre ha condenado.