Francisco debe dimitir

María Ferraz


Preparémonos, porque la avalancha de porquería que va a salir de las diócesis del mundo entero en torno a los abusadores sodomitas puede ir a una con el drenaje del pantano de Trump. 

Todo empezó en Chile, donde Bergoglio se hizo el remolón con el violador de jóvenes, Barros, pero después tuvo que dar su brazo a torcer porque creció la presión mediática y peligraba su mismo cargo. 

Más tarde salió el caso de Pineda en Honduras, quien ha renunciado sin admitir sus culpas, y a Maradiaga, el vice Papa, cuando le fueron referidos en una carta los abusos, no sólo de Pineda, sino de que la mitad de los seminaristas/profesores del seminario mayor eran sodomitas, tildo a los 40 firmantes escandalizados, de chismosos, y no lo admitió.

Ahora le ha tocado el turno a McCarrick; esperemos que vayan cayendo sus socios maricones-metemano y sean expulsados. Pero serán los laicos y los medios de comunicación los que presionen: que nadie piense que un obispo va a sacar a la luz los desvíos sexuales de sus compañeros, o bien porque no quieren perder su estatus, o porque son tan pervertidos como ellos.

Bergoglio no sólo es cómplice, sino directamente artífice de los tráficos de influencia y ha dado poder a los perversos sexuales dentro de la Iglesia de Jesucristo, nombrando a cardenales pro sodomía sin parar desde que llegó -por caminos torticeros y no ciertamente del Espíritu Santo -al puesto de Vice Cristo. 

Si alguien tiene que renunciar es él y además con prontitud.


Informa en.news:

¿Forma parte de la red gay? 



Joseph Tobin, famoso por publicar por error un tuit chocante: "Buenas noches, cariño" (NT: ahora podemos casi asegurar que su destinatario no era una mujer sino un hombre), fue elevado cardenal gracias a McCarrick

Hace dos años, Rocco Palmo escribió que el cardenal pro-gay Joseph Tobin (NT: el que celebró una peregrinación con una misa para "matrimonios" del mismo sexo y les dio de comulgar)  de Newark debe su carrera al cardenal Theodore McCarrick.

El 27 de julio, Palmo reveló en Twitter que los defensores de Tobin lo criticaron por los hechos ya que ahora se sabe que McCarrick fue acusado de abusos homosexuales.

Palmo escribió que McCarrick envió en septiembre de 2016 una carta al Papa Francisco solicitando el nombramiento de Tobin en Newark. La información proviene de dos fuentes directamente involucradas.

Antes de la carta de McCarrick, el nombre de Tobin nunca fue nombrado como candidato. Palmo agrega que Francis nombró a Tobin poco después de la carta de McCarrick, en noviembre de 2016. En el mismo mes, Tobin se convirtió en cardenal. Francis tiene la costumbre de eludir los procesos de nominación regulares para promover a sus amigos liberales pro-gay.