La piedad de los niños nos sorprende



¡Ella solo tiene 5 años! Los niños pequeños criados en familias que rezan nos conmueven con su generosidad y seriedad al expresar su amor por Jesús. En Roma, la pequeña Chiara, de 5 años, es un buen ejemplo. Antes de Navidad, ella aprendió de su madre a preparar el pesebre del niño Jesús con trocitos de pajas. Habían recogido algunas ramitas, y ella fue invitada a colocarlas poco a poco en el pesebre para calentar a Jesús cuando viniera al mundo. Cada rama representaba un esfuerzo de su parte, o un sacrificio ofrecido a Jesús.


Un día, Chiara le dijo a su madre: "Sabes, mami, esta noche, voy a decir todo el rosario, así puedo poner una ramita en el pesebre de Jesús". De hecho, Chiara tenía la costumbre de quedarse dormida bastante rápido durante la oración, por lo que su madre la felicitó por su buena intención.

Como todas las noches después de la cena, la familia se reunía para rezar el Rosario. Recordando su decisión, Chiara rezó todo el Rosario, ¡e incluso de rodillas! Sus padres la vieron luchar contra el sueño y contener sus bostezos con coraje. Luego, irradiando alegría, fue a colocar 3 ramitas en el pesebre de Jesús.

Su madre le preguntó, ¿por qué 3 ramitas y no una? Chiara explicó: 

"1. Porque dije todo el Rosario. 

2. Porque lo dije de rodillas. 

3. Porque perdoné a Luigi "(su hermano de 7 años).

Durante esta Cuaresma, Luigi y Chiara hicieron algo similar, pero con un material diferente: por cada sacrificio, cada esfuerzo, eliminan una espina de un cojín que representa el corazón de Jesús. ¿Y yo? ¿Cuántas espinas voy a quitar de la corona de Jesús antes de celebrar su resurrección en la Pascua?

Sor Emmanuel