Estoy asqueado de los pecados de los hombres

 
A pesar de Mi Divinidad, Me siento asqueado y disgustado con los pecados del hombre


Mi muy amada hija, el tiempo de los preparativos para el GRAN AVISO es corto. Este es un tiempo cuando, no importa cuán dolorosa sea la persecución, deben ignorar todo excepto Mi Santa Palabra.

 (...) Preparen sus almas y recen por aquellos que morirán en pecado mortal durante el GRAN AVISO.

Ustedes, Mis seguidores y Mis siervos sagrados, soportarán ahora el dolor que Yo siento, al mirar a los miserables pecadores. A pesar de Mi Divinidad, Me siento asqueado y disgustado por el pecado del hombre que desfila ante Mis Ojos.

La arrogancia, la insolencia y el orgullo, demostrado por estos pecadores, emula exactamente las características de Satán y sus demonios. Estos mismos espíritus malignos han devorado las almas de los hijos de Dios, así es que ellos ya no se parecen a los hijos que tomaron su primer aliento.

Tan llenos de orgullo y convencidos de su propia invencibilidad están, que ya no son capaces de permitir que el Espíritu de Dios toque sus almas. Este es el por qué ellos necesitan de sus oraciones.

Yo los bendigo a ustedes con la Gracia de salvar estas almas y deben, por Mi causa, ayudarme a ayudarlos.

No contentos en satisfacer su propia lujuria para alimentar sus deseos corporales, el hombre entonces siente que debe interferir con Mi Creación. El, da pasos en donde trata, no solo de emular el Poder de Dios, cuando se trata de la Creación de la vida humana y el quitar la vida humana, sino que él piensa que tiene el poder de reemplazar la Existencia de Dios. El cree ahora en su propia divinidad, que no es más que una mentira, puesta dentro de su alma por Satán, a quién él ha prometido su lealtad.

Estos pasos, que el hombre toma ahora, van más allá de los límites permitidos por Dios. Ahora que las Iglesias de Dios están por ser sitiadas por el espíritu del maligno, de los enemigos e impostores, el castigo descenderá finalmente sobre la Tierra.
 
El Poder de Mi Padre será presenciado y Su castigo será severo. Impactará incluso a los pecadores más arrogantes, que no tendrán dudad de la Mano de Quién ha caído sobre la Tierra. Mi Padre hará esto con el fin de librar a la Tierra de la maldad, al mismo tiempo que permite, el crecimiento de Su ejército de leales seguidores, que ayudarán en la salvación de las almas.

El pecado ha dañado la Tierra sobre la que ustedes caminan y este puede ser visto en la enfermedad, la contaminación y la corrupción dentro de sus gobiernos. La mancha del pecado cubre el mundo, por lo que se ha convertido en una cosa repugnante y vil a los Ojos de Mi Padre. El, que creó el mundo como un lugar en donde pudiera alimentar a Su familia, está desconsolado.

Mi Padre está también enojado y la balanza de la justicia se ha inclinado ahora. Su castigo no puede ser detenido donde se ha hecho necesario.

Ayuden a sus hermanos y hermanas, especialmente a aquellos, que han creado leyes, que interfieren con aquellas creadas por Dios, el Altísimo. Ustedes deben hacer esto a través de la Cruzada de Oración. Sean fuertes, sean valientes, tengan esperanza y no teman nada, si ustedes Me aman. 



Su Jesús

 

14 de enero del 2013,
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