El canal Divinity, en Tele5, con el terapeuta Gary Direnfeld y el programa “Exposados” va contra corriente en una cultura globalizada divorcista en la que las desavenencias acaban en ruptura segura.
Este profesional enseña a los matrimonios arreglar sus problema sin recurrir al divorcio: Gary Direnfeld es un terapeuta de familia canadiense, con más de 30 años de experiencia. Está a punto de sacar en inglés su libro “Rescatar el matrimonio: superar diez pecados mortales en relaciones que fallan”.
Es un hombre que dice que las cosas han cambiado con los años. Así, afirma que hoy los “affaires” e infidelidades empiezan en Facebook, con una pendiente peligrosa. “La gente flirtea en las redes y medios sociales, queda atrapada en ello. Nunca se han encontrado, no hay sexo pero ¿es ya engañar?”, plantea. Es, sugiere, un primer paso.En ‘Exposados’, las parejas son presentadas con el vídeo del día de su boda y posteriormente se muestran los detalles de su relación que se han ido deteriorando. Hay problemas de ronquidos, de hábitos de higiene sospechosos, problemas económicos, del reparto de tareas domésticas… Algunos espectadores con matrimonios firmes dirán “¿cómo pueden aguantar en esas condiciones?” Otros dirán: “se ahogan en un vaso de agua, eso jamás fue causa de problemas en mi casa”. Pero de todo se aprende.
El programa es un espacio de ‘coach’ cuyo objetivo es solventar los problemas matrimoniales con una terapia eficaz y divertida con una base dura y poderosa; la sinceridad mutua. De forma amable y distendida, se expone al terapeuta cuáles son las manías, hábitos molestos y pequeños detalles que hacen enfurecer a la parte contraria. El matrimonio expone sin tapujos lo que no soportan el uno del otro.
Luego, el terapeuta ofrece una serie de consejos a la pareja para que los ponga en práctica durante una semana de convivencia de la que los espectadores también serán testigos.
Direnfeld no tiene soluciones mágicas, sino sabiduría de toda la vida. Así, previene en sus libros de poner a los amigos/as antes que al esposo (sean manicuras, pedicuras o amigo/as de “cervecita tras el trabajo”). Habla de las peleas por “¿quién limpia el baño?” Y anima siempre al diálogo y la reconstrucción. La terapia es posible, y la ruptura rápida, una trampa.
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