*Muchas almas están muertas



Dios Padre a Javier  Viesca (México) Junio 2012
 
 
Hijitos Míos, estos son tiempos de una resurrección de almas, muchas almas están muertas en estos momentos porque están muy alejadas de Mí y están viviendo con faltas graves, no les interesa nada de lo que viene de Mí y, si pueden, hasta lo atacan.

Sí, se os ha hablado de una resurrección de muertos, y ¿qué más muerte que vivir en pecado mortal y no tenerMe a Mí en su corazón? Es tiempo de que todos vosotros, como hermanos, pidáis los unos por los otros y especialmente vosotros, los que estáis Conmigo, los que oráis de corazón, los que os mantenéis todavía unidos a Mí, que recéis por aquellos hermanos vuestros que están destrozados espiritualmente.

Sí, Mis pequeños, hay tantos, tantos hermanos vuestros alrededor del mundo que están destrozados espiritualmente porque no se han mantenido en Mí. Por los mismos pueblos donde viven, por culpa de satanás, se han vuelto hacia el mal, satanás ha hecho su obra destructiva, mala, pero vosotros no habéis hecho gran cosa por contrarrestarla, aún sabiendo que existen Mis Mandamientos. 

Sodoma y Gomorra vivían ciertamente, en el mal, pero no tenían las bases espirituales que vosotros tenéis. Ellos no habían conocido la Predicación de Mi Hijo, ellos no habían conocido la predilección que Yo tengo para con vosotros, por eso vuestro pecado es peor y así seréis juzgados, porque al que mucho se le da, también mucho se le pide y esta generación ha tenido mucho, mucho de Mí, vuestro Dios y lo habéis rechazado. La maldad está por todas partes y no hacéis mucho para contrarrestarla.


Los que estáis Conmigo sois como pequeños islotes en un océano inmenso, así es la proporción del mal con el Bien. La maldad trata de cubrir ésos islotes que sois vosotros, los que todavía oráis, los que todavía respetáis Mis Mandamientos, los que todavía tratáis, en cierta manera, de manteneros como hermanos, porque tenéis y buscáis un mismo fin, que es el de agradarMe y del estar Conmigo, vuestro Dios y, ciertamente, por vuestra intercesión, Mis pequeños, que sois Mi pequeño pueblo, muchos se salvarán, aún a pesar de que sean demasiados los que están en posibilidad de una muerte eterna. 

Os he pedido tanto que oréis por toda la humanidad, porque estos son tiempos de oración, pero no oréis solos, orad unidos a Mi Hijo, orad unidos a Mi Hija, la Siempre Virgen María, orad junto con la Comunión de los Santos, orad desde lo más profundo de vuestro corazón. 

Os pido que no toméis todo esto a la ligera, porque cuando se venga el tiempo de Mi Justicia, y del ataque del mal, os acordaréis de Mis Palabras, pero ya habréis desperdiciado mucho tiempo que si hubierais utilizado ése tiempo en oración, ése mal que se os vendrá, puede menguar. De vosotros depende vuestra prueba y la intensidad de los castigos que, ciertamente os merecéis, pero que se pueden aliviar con vuestra respuesta, como en Nínive.

Tenéis tantos ejemplos en las Sagradas Escrituras para que vosotros os dejéis guiar por el camino correcto y no sufráis. Id a buscarMe en las Sagradas Escrituras, conoced el comportamiento pasado de los hombres con su Dios y el comportamiento humano con la presencia de Mi Hijo y Sus Enseñanzas. 

Yo Soy vuestro Dios, del Presente, del Pasado y del Futuro. Mi Hijo vino a Enseñaros lo que Yo Soy. Entended, Mis pequeños, ya de una vez esto, para que vuestro dolor no sea tan grande, Yo Soy un Dios de Bondad y no quiero veros sufrir, pero de vosotros depende.

Gracias, Mis pequeños.