*Excomulgados los líderes de "Somos Iglesia"




Martha Heizer 
ROMA, 23 May. 14 / 11:35 am (ACI).- Los esposos austríacos Martha y Gert Heizer, líderes del grupo disidente “Somos Iglesia” que promueve una serie de posturas contrarias a la doctrina católica, incurrieron en excomunión automática confirmada luego por un decreto del Obispo de Innsbruck (Austria), Mons. Manfred Scheuer, tras celebrar en varias ocasiones la Eucaristía en privado y sin la presencia de un sacerdote, un delito grave dentro de la Iglesia Católica.

“Debido a su anuncio de la práctica de celebraciones privadas de la Eucaristía sin sacerdote, Martha y Gert Heizer han creado una situación en la que yo, como Obispo de Innsbruck, he tenido que emprender acciones legales”, señala Mons. Scheuer a través de un comunicado dado a conocer por su diócesis.
El decreto fue firmado con fecha del 21 de mayo y de acuerdo a la normativa, la pareja tiene 10 días para solicitar la revocación del mismo. Para ello, deben dirigirse al Obispo demostrando estar arrepentidos y reconociendo la profundidad del daño causado.
“Con gran pesar, me parece no ha habido ningún replanteamiento hasta ahora por parte de los involucrados”, y “considero que la pareja Heizer sabía qué situación estaban causando y qué significan sus acciones para la Iglesia”, lamenta.
“La Eucaristía por su propia naturaleza es una celebración de toda la Iglesia y no puede celebrarse en privado”, “los criterios para las condiciones para recibir la Eucaristía no pueden ser establecidos por la voluntad subjetiva de los involucrados”, recalca.
Hasta el momento los Heizer no han mostrado arrepentimiento por sus actos y en un comunicado publicado por el sitio web oficial del movimiento “Somos Iglesia, afirman que “seguiremos trabajando con mucha fuerza”.
En declaraciones a ACI Prensa, el Padre Manuel Dorantes, asistente de la Dirección de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, de acuerdo a la normativa de la Iglesia Católica, los Heizer ya habían incurrido en la excomunión automática al cometer el delito de “celebrar” la misa sin un sacerdote.
“El atentar la celebración de la Eucaristía por una persona que no ha sido ordenada, es un asunto grave para el cual el Derecho Canónico de la Iglesia establece como es bien sabido, la excomunión latae sententiae (automática), que es impuesta automáticamente cuando se da en el mismo acto”, subrayó.
Según el P. Dorantes el asunto no ha transcendido a las esferas de la curia romana y por el momento “le compete al Obispo local”. “No parece que la Congregación para la Doctrina de la Fe haya realizado algún acto específico recientemente” al respecto, concluyó.
¿Qué es Somos Iglesia?
El autodenominado grupo "Somos Iglesia" ha promovido desde su fundación en 1995 la disidencia en sectores eclesiales junto a grupos y personas que no cuentan con el aval eclesiástico tales como el teólogo Hans Küng, que carece de licencia para enseñar teología desde 1980, y el grupo feminista y abortista "Católicas por el derecho a decidir".
En mayo de 2011, el Obispo de Oruro (Bolivia), Mons. Cristóbal Bialasik, explicó a ACI Prensa que los miembros del grupo disidente Somos Iglesia "según mi investigación, están promoviendo todo lo que es contra la doctrina de la Iglesia. Proponen la ordenación de las mujeres al sacerdocio, ordenación de homosexuales, promueven el aborto y métodos anticonceptivos".
El Prelado afirmó que esta agrupación promueve "todo lo que signifique estar contra la doctrina de la Iglesia, contra el clero. Es anti-jerárquica, con una postura reduccionista a través de las cuales busca construir una Iglesia según su imaginación".
“Somos Iglesia” trabaja estrechamente con una asociación de teólogos que se denomina Juan XXIII, la Conferencia para la Ordenación de Mujeres en el Sacerdocio, Amerindia y otros grupos que también mantienen posturas contrarias al Magisterio de la Iglesia.
En julio de 2002, los obispos españoles indicaron mediante un comunicado que “Somos Iglesia” es un grupo disidente que no pertenece a la Iglesia Católica “y no ha recibido ninguna aprobación ni reconocimiento canónico”, además de que propone “afirmaciones y reivindicaciones que se apartan claramente de las enseñanzas de la Iglesia Católica, hieren y van en detrimento de la comunión eclesial”.