*Vidente de Merjugorje perdió el pergamino con los 10 secretos de la Virgen

mirjana

Un musulmán interviene milagrosamente.
Durante la guerra en Bosnia, que se desarrolló entre 1992 y 1995, el pergamino dado por la Virgen a la vidente Mirjana conteniendo los 10 secretos proféticos, había quedado en Sarajevo, inaccesible para ella porque se encontraba en Medjujorge. Mirjana estaba afligida y le pidió a María su auxilio, quien le contestó que lo dejara en manos de su hijo.

En un hecho milagroso, un soldado español sintió el impulso de entrar en la casa de la familia de Mirjana en Sarajevo donde se encontraba el pergamino y oyó una voz que le decía que lo entregara en Medjugorje a Mirjana Dragicevic-Soldo.

CARACTERÍSTICAS Y FUNCIÓN DEL PERGAMINO CON LOS 10 SECRETOS

Nuestra Señora dio a la vidente Mirjana Dragicevic-Soldo en su última aparición diaria del 25 de diciembre de 1982 el pergamino con los 10 secretos. De acuerdo a la vidente, el pergamino es de color entre blanco y amarillo, puede ser doblado o arrugado, pero no puede ser destruido. En ella figuran los datos relativos a los diez secretos.
El pergamino, cuando llegue el momento, será entregado al padre Petar Ljubicic, que puede leer sólo la fila correspondiente al secreto que va a ser revelado. Él y Mirjana ayunarán durante 10 días, y tres días antes de cada evento, el Padre Peter Ljubicic revelará lo que va a pasar y donde va a suceder. Ver más sobre los 10 secretos aquíaquí, y aquí.
Cuando Nuestra Señora dio a la Mirjana el pergamino, lo entregó abierto con las ambas manos extendidas.

ESTALLA LA GUERRA, EL PERGAMINO ESTABA EN SARAJEVO Y MIRJANA EN MEDJUGORJE

La vidente fue a mostrar el pergamino a dos personas en Sarajevo, donde vivían, pero no podían leer el contenido. Y Nuestra Señora pidió a Mirjana después de esto, que no se lo mostrara a nadie más.
El pergamino quedó en Sarajevo, capital de Bosnia-Herzegovina, escondido dentro de su mochila.
Cuando estalló la guerra en la antigua Yugoslavia, Mirjana estaba en Medjugorje y no pudo volver a recuperar el documento.
Mirjana estaba  afligida con el hecho de que pergamino se hubiese quedado en Sarajevo, que era inaccesible durante la guerra.
Durante una aparición, Mirjana pidió a la Virgen por el pergamino. La respuesta de la Virgen fue:
No te preocupes por eso. De esto se hará cargo de mi hijo”

APARECE EL SOLDADO MUSULMÁN

Poco después, un soldado español, de las fuerzas de paz de la ONU, sintió un fuerte llamado a entrar en la casa de la familia de Mirjana en Sarajevo. Al entrar, vio la bolsa y la tomó y cuando abrió, vio el pergamino adentro.
Entonces el soldado oyó una voz que le decía:
Ve a Medjugorje y entregaselo a Mirjana Dragicevic-Soldo”
El soldado no cuenta nada a sus compañeros de su equipo y al llegar a Medjugorje pregunta quien es la persona y le responden que una de las videntes de la Virgen.
El soldado, que es de otra religión (probablemente musulmán), le pide a Mirjana encarecidamente no ser identificado.
Cuando el soldado le fue a entregar el bolso a Mirjana, ella preguntó:
“¿Cómo sabes que me pertenece?”
Él dijo:
“Tuve una sensación en mi corazón que debía traerte esto a ti”.
Esto lo relató Miljana Barbaric, una sobrina del fallecido sacerdote P. Slavko Barbaric a Gabriel Paulino, director de Medjugorje Brasil. La Sra. Barbaric es un pariente lejana de Mirjana, porque el P. Slavko fue también tío del marido de Mirjana, Marko Soldo.