La meditación, la risa y la tristeza afectan al cerebro

-La tristeza afecta al cerebro: el organismo y el cerebro requieren más oxígeno y más glucosa durante estos procesos emocionales, se siente estresado y colapsado de sensaciones y emociones, de ahí que necesite más “combustible” para poder funcionar… un estado que a nosotros, dado ese gasto energético, nos provoca más cansancio. La tristeza agota, y cuando estamos muy cansados ni siquiera podemos dejar caer las lágrimas. Nadie puede llorar durante un día entero, es un acto que puede realizarse en pequeños episodios, pero no de modo continuado.
-Pérdida de gusto por lo dulce. Es un hecho curioso, pero cuando atravesamos estos procesos de tristeza el cerebro deja de recibir en la misma intensidad la sensación del dulce, disminuye el número de receptores en la lengua y las personas no captamos del todo el sabor, de ahí que solamos comer más, qué busquemos más cosas dulces porque no acabamos de encontrar el mismo placer que antes.
-Bajo nivel de serotonina. Cuando vivimos estos periodos de marcada tristeza, el cerebro deja de producir serotonina a un nivel que se considera adecuado, y un déficit en este neurotransmisor supone que puedan aparecer a medio o largo plazo las temidas depresiones, las obsesiones compulsivas e incluso pequeños ataques violentos. El cerebro es una máquina compleja que, ante situaciones de estrés, ansiedad, miedos…etc, altera su producción de neurotransmisores, y esto siempre afecta a nuestra conducta.

El cerebro es un órgano magnifico que a largo plazo es capaz de autorregularse por sí solo, dispone además de varios mecanismos de defensa mediante los cuales nos protege, guardando en nuestra memoria recuerdos mediante los que podemos aprender, situaciones a las que nos podemos anclar para ayudarnos a salir de las mareas de la tristeza.

Un estudio, realizado en la Universidad de Loma Linda (California) y dirigido por Gurinder Singh, ha encontrado que la risa activa las ondas cerebrales similares a las asociadas con la meditación. También encontró que el estado de meditación verdadera puede mejorar la memoria y reducir los efectos del estrés.
El estudio incluyó a 31 personas cuyas ondas cerebrales fueron monitoreados mientras veían programas de humor, programas espirituales y vídeos angustiantes. Los investigadores observaron que viendo los videos humorísticos, los cerebros de los voluntarios producían altos niveles de ondas gamma, que son los mismos que se producen durante la meditación .
Durante los videos espirituales, los cerebros de los participantes mostraron niveles más altos de ondas cerebrales alfa, similares a los que se producen cuando cuando una persona está en reposo. Los videos angustiantes causaban ​​bandas de ondas cerebrales plana, similares a los producidos cuando una persona se siente aislada, que no responde o que no quiere estar en una situación determinada.
En el estudio también participó el profesor Lee Berk de la Universidad de Loma Linda, en California, el cual declaró:  “Lo que hemos encontrado en nuestro estudio es que el humor asociado con la risa alegre sostiene oscilaciones de gran amplitud de banda gamma. Gamma es la única frecuencia que se encuentra en todas las partes del cerebro”.


Y añadió: “Lo que esto significa es que el humor en realidad implica a todo el cerebro, es una experiencia total del cerebro con la frecuencia de la banda de ondas gamma y el humor, similar a la meditación, lo mantiene ahí”.

Un entrenamiento para el cerebro

Berk también dijo que con la risa “es como si el cerebro recibiera un entrenamiento.” Este efecto es importante porque “permite durante los estados de sentimientos subjetivos tener la capacidad de pensar con mayor claridad y tener pensamientos más integradores”. Añadió que “esto es de gran valor para las personas que necesitan o quieren volver a visitar, reorganizar o cambiar varios aspectos de sus vidas o experiencias, para que se sientan íntegros o más centrados”.
Como decíamos, este estudio también afirma que el estado de meditación verdadera puede mejorar la memoria y reducir los efectos del estrés.
“Es sencillo, cuanto menos estrés mejor es tu memoria”, ha dicho sobre este tema el doctor Berk. El humor reduce las hormonas del estrés, como el cortisol, que son perjudiciales para la memoria ya que disminuyen   las neuronas del hipocampo. El humor también reduce la presión arterial y aumenta el flujo de sangre y el estado de ánimo.
El acto de la risa, o simplemente disfrutar de un poco de humor, aumenta la liberación de endorfinas y la dopamina en el cerebro, lo que proporciona una sensación de placer y recompensa”, ha dicho Berk. “Estos cambios neuroquímicos positivos y beneficiosos, a su vez, hacen que el sistema inmunológico funcione mejor. Hay cambios incluso en la actividad de las ondas cerebrales hacia la frecuencia de la banda de onda gamma, que también amplificar la memoria y el recuerdo”.
Entre las conclusiones que los investigadores han derivado de este estudio en relación con la memoria, destaca la importancia para las personas mayores. Los componentes cognitivos (la capacidad de aprendizaje y memoria diferida) sufren a medida que envejecemos y son esenciales para que los adultos mayores puedan  mejorar su calidad de vida, en lo que se refiere a la mente, al cuerpo y al espíritu.
A pesar de que las personas mayores tienen déficits de memoria relacionados con la edad, las terapias de humor son muy beneficiosas, por los que los investigadores recomiendan ofrecerlas.



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