Jesucristo acusa a Bergoglio




Ven, (...)

Escribe como siempre, con el don que te he dado de poder poner por escrito lo que te inspiro, con la intención de darte a conocer lo que pienso respecto a ti, respecto a los demás, respecto al mundo y a Mi Iglesia que se halla hoy muy asediada por todas partes, ya que el que ostenta la máxima autoridad en su gobierno se ha vendido a las sociedades secretas y con ello a Satanás y sólo busca hacer su voluntad expresada en el derrumbamiento de Mi doctrina y la fe en Mí, tal como os la transmití, o directamente, o a través de Mis instrumentos, que dejaron por escrito todo cuanto es necesario para salvarse.

Y Mi Iglesia tiene esa única misión principal: la de llevar a las almas a la salvación eterna, impidiendo como pueda, que las almas se condenen.

¿Y qué hace el Sr. Bergoglio? Él hace y deshace por cuanto sus directrices vienen del mismísimo demonio, al punto de tergiversar Mi Palabra, Mis Mandamientos y hasta las condiciones que hacen que un sacrilegio contra Mí mismo sea ya válido. Por orden suya, si bien con subterfugios y medias verdades, hace parecer que es el Dios de la Misericordia quien le inspira semejantes aberraciones las cuales no han sido superadas por ningún enemigo mío hasta el día de hoy.

Porque, ¿quién se ha atrevido antes que él a entregarme a las almas en estado de pecado mortal, horrendas a Mi vista y significativamente unidas a Satanás, puesto que se trata de pecadores que no tienen intención de enmendarse?

Nadie sino Bergoglio, el amo de la mentira disfrazada de compasión, me ha dado como alimento espiritual a las sentinas satánicas, que eso son los pecadores en enemistad conmigo. 

¿O qué crees que pretenden esos que se llaman modernistas, sino atacarme en Mis Hostias consagradas en las cuales Yo estoy verdaderamente presente con Mi Cuerpo, Alma, Sangre y Divinidad?

¿O es que crees que no es el odio lo que les mueve, puesto que es un odio satánico engendrado en ellos que son sus seguidores (del demonio), y que lo que pretenden es vengarse de Mi Bondad y por esto, como lo hacen los satanistas, quieren no sólo profanarme ellos, sino si pudieran, el conjunto de los católicos?

¡Oh abominación que has llegado al límite de tus fuerzas!. 
Yo te digo que caerá junto con Satanás, toda su cohorte, y serán sepultados en el Abismo horrendo por los siglos sin fin, por haber abusado de Mi humildad y disponibilidad en la Hostia Santa hasta un punto desde el que no se puede ir más allá.

Yo bendigo y maldigo.

Bendigo a los que con amor, fe y valentía Me defienden de los hombres con la sana doctrina aun a costa de perder sus beneficios que de la Iglesia emanan, ya sea de su cargo o sueldo y en cambio maldigo a los que miserablemente Me hacen la guerra para sacar un provecho material u honorífico, premiados por aquellos que se han declarado Mis perseguidores, perseguidores también de los que no aceptan sus abominaciones. Éstos irán al fuego eterno si no se arrepienten y a muchos de ellos les aguarda la suprema tortura del remordimiento sin fin de saber que, si Me hubieran sido fieles, gozarían de las delicias del Paraíso eterno.

Ven, te bendigo, 
soy tuyo
Yo, Tu Jesús

Mensaje a un alma mística, enero 2017