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| Gregory Baum |
Dice el texto anterior: El P. Rosica sobre Baum: "Durante todos los años que le conocí G. Baum amó a la Iglesia. En otras declaraciones dice: "No podemos negar la significativa contribución que hizo (Baum) al Concilio VII. Todos los desafíos de su estilo de vida (aquí debería decir homosexual activo mientras se vestía de sacerdote) no debe ensombrecer la gran contribución que hizo a la Iglesia"
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Gregory Baum fue sacerdote, luego ex sacerdote y un malicioso hereje, disidente en temas de anticoncepción, celibato sacerdotal, promotor del matrimonio de parejas homosexuales
Padre Thomas Rosica. ¿Eso es todo? ¿Eso es todo lo que tiene que decir sobre el "hereje" que fue la influencia más destructiva sobre la Iglesia Católica en Canadá desde la década de 1960? ¿A quién debo creer? ¿A Ud. o al santo monseñor Vincent Foy? ¡A quién, por cierto, Ud. ignoró cuando murió!
No, Thomas Rosica. El ex sacerdote y practicante homosexual Gregory Baum no amaba a la Iglesia. Odiaba a la Iglesia. Él fue un traidor de la Iglesia. ¡Odiaba a Nuestro Señor! Durante el Concilio Vaticano II, como peritus, ayudó a formular documentos mientras se entregaba a actos sexuales no naturales con otro hombre. ¿Se puede imaginar algo más nauseabundo?
Baum vivió en estado de pecado mortal, un alma separada de Dios. No, P. Rosica, Gregory Baum no amaba a la Iglesia. Durante décadas, fue un hipócrita, un mentiroso, un engañador, un destructor y SOBRE TODO: UN SACERDOTE DE JUDAS.
Amigos, ahora entienden por qué la Iglesia Católica está en tal estado de decadencia en Canadá.
Ahora, reflexionemos más sobre la patética tragedia que fue Gregory Baum.
Gregory Baum murió, aparentemente, como un hereje no arrepentido. Baum, un perito disidente en el Concilio Vaticano II, también fue a lo largo de los años un ex sacerdote, un hombre "casado", practicante homosexual, traidor de sus votos sacerdotales, disidente sobre la moral sexual.
Baum, sin ayuda, según el ahora difunto y santo Monseñor Vincent Foy, fue la fuerza más influyente y destructiva que golpeó a la Iglesia Católica en Canadá. El monseñor se refirió correctamente a Baum como un "maliciosos hereje". Durante varios años, Baum incluso logró engañar al arzobispo Pocock de Toronto, antes de que el arzobispo se distanciara del sacerdote apóstata.
Las herejías de Baum se conocen desde hace años. Baum trabajó intensa y enérgicamente promoviendo la disidencia, tanto en Canadá como en el extranjero. Su estilo de vida homosexual activo, sólo se conoce oficialmente desde el año pasado, cuando Baum publicó una autobiografía.
Cuando Monseñor Foy murió, su muerte fue ignorada por los poderosos, los ricos, la élite. Sin embargo, esta es una buena señal. Significa que, como Nuestro Señor antes que él, Monseñor Foy era odiado por el mundo.
Thomas Rosica nos quiere hacer creer que "su estilo de vida" (el código para decir que Baum fue un sodomita activo) de ninguna manera debería impedir la "gran contribución" del hereje de Baum a la Iglesia. ¡Increíble! Un "desafío" Tom Rosica? Lo siento, pero la homosexualidad, sin un arrepentimiento sincero, lo coloca en el infierno, como nos dice San Pablo (inspirado por el Espíritu Santo) en el Libro de Romanos.
La muerte patética de Gregory Baum no se ha recibido con oraciones por su alma torturada, oraciones por las que podría haberse arrepentido en su lecho de muerte. No, no oímos nada sobre oraciones. Sólo oímos sobre lo maravilloso que era, qué gran hombre era. La alabanza proviene de la élite poderosa, católica, que no hizo nada para evitar que Baum difundiera la confusión y la falsedad mientras aún vivía.