El Vaticano, un estado espía




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El nivel de control sobre los correos electrónicos, teléfonos fijos e incluso sobre algunas categorías de teléfonos móviles en el Vaticano está alcanzando niveles “que serían la envidia hasta de Corea del Norte”, según Marco Tosatti.

Al escribir en su blog, el 21 de diciembre, Tosatti señala que durante su discurso de Navidad Francisco amenazó abiertamente a la curia romana. Según Tosatti, esas palabras “no serían diferentes si hubiesen sido pronunciadas en la secretaría del Partido Comunista Chino en la década de 1970”.

Para Tosatti, esto es un signo que el nivel de disconformidad en la curia crece, fuera de los vértices de los dicasterios, ahora nombrados casi en su totalidad por Francisco o aprobados por su régimen. En consecuencia, Francisco debe recurrir a amenazas explicitas, “ciertamente nunca escuchadas en la boca de un vicario de Cristo”, escribe Tosatti.