La sala de prensa vaticana publicó el 30 de enero una nota, contradiciendo declaraciones hechas por el cardenal Joseph Zen, de Hong Kong.
Zen escribió el 29 de enero en su blog que el papa Francisco le dijo que él no quiere reemplazar obispos católicos chinos con obispos del régimen comunista, aunque una delegación vaticana pidió exactamente eso.
La declaración del Vaticano niega ahora “noticias sobre una presunta diferencia de pensamiento y acción entre el Santo Padre y sus colaboradores”. Dice que Francisco está en “contacto constante” con sus colaboradores, está informado en detalle y sigue con “especial atención” el “dialogo” con el régimen chino.
La declaración ataca brutalmente al cardenal Zen sin nombrarlo: “es entonces sorprendente y lamentable que haya personas en la Iglesia que afirmen lo contrario, fomentando confusión y controversias”.
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