La falta de perdón, una forma de soberbia


Una vez más veo una gran llama que he llegado a reconocer como el Corazón de Dios Padre. Dice: “Yo soy el Padre de todas las generaciones. Vengo para unir el corazón del hombre a Mi Corazón Paternal. 

El pecado más insidioso que obstruye el camino es la falta de perdón. La anatomía de la falta de perdón siempre está basada en la soberbia. Con mucha frecuencia, el alma no puede aceptar que la trataron injustamente. Entonces, tampoco puede aceptar las faltas de los demás, aun cuando sus propias faltas pueden ser mucho peores. Eso es una forma de santurronería. Cuando se les muestran las faltas de los demás, no es para recriminarlos, sino para que recen por la persona.”


“Otra trampa es no perdonarse a sí mismos, lo cual es sentimiento de culpa. Esto también es soberbia, pues el alma no puede aceptar su pecaminosidad humana. La falta de perdón se centra en uno mismo. El perdón es una imitación de la divina misericordia.”


Lean Efesios 4:31-32
Eviten la amargura, los arrebatos, la ira, los gritos, los insultos y toda clase de maldad. Por el contrario, sean mutuamente buenos y compasivos, perdonándose los unos a los otros como Dios los ha perdonado en Cristo.