Muchos pueden pensar que, algunos conceptos chocantes que expresa Bergoglio, ya sea de palabra o de obra, son fruto de la improvisación, de ideas ajenas, de influjos modernistas o simplemente para incluir algo llamativo en su ministerio, ya sea lavando pies a mujeres o moros, casando en aviones, bendiciendo hojas de coca, haciéndose fotos con maricones y artistas hollywoodenses pro travestismo, colgándose al cuello un crucifijo marxista, luciendo una pulsera del orgullo gay, invitando a genocidas a dar conferencias al Vaticano o rezando ante tumbas de pseudo curas pederastas..
Pero siempre, invariablemente a sus "herejías o ideas innovadoras" con propósito, en una estrategia impecable, le sigue un lacayo, desenrollando el hilo del disparate.
Todo empezó con: Quiero una Iglesia pobre para los pobres y con un ¿quién soy yo para juzgar? para acabar consumando la profanación de "su" Dios en la Eucaristía.
Informa en.news:
El mal ejemplo de Francis encuentra sus primeros seguidores
El Obispo de Limerick Brendan Leahy cree que el matrimonio a bordo de un avión que "celebró" el Papa Francisco debería hacer que la Iglesia considere casar a las parejas fuera de los edificios de la iglesia. (NT: está claro que cuando las iglesias se convierten por los mismos obispos, y cada vez más, en salas de conciertos o pizzerías habrá que plantearse casar en otro sitio)
Hablando con The Irish Catholic (25 de enero), Leahy dijo que Francis ha abierto "nuevas perspectivas".
Leahy también quiere que los laicos celebren matrimonios, "No tiene por qué ser un sacerdote, entonces, ¿quién sabe el futuro?"
Este obispo parece ser poco consciente de la tendencia en Occidente de celebrar los pocos matrimonios católicos que todavía se contraen, en todas partes, excepto en una iglesia parroquial regular.
En vista de sus menguantes números, su propuesta de matrimonio laico suena como una broma estúpida.