Las organizaciones de lesbianas, gays, bisexuales y transexuales sicilianas salieron a protestar cuando un sacerdote les dijo a dos feligresas que ya no podían recibir la Sagrada Comunión.
Paola Desi, 27, y Maria Grimaldi, 25, contrataron una unión civil el 3 de abril. Son feligresas en Don Sebastiano Gulinello de la Iglesia de la Inmaculada.
El sacerdote dio la bienvenida a las mujeres a la Sagrada Comunión hasta que la pareja publicó fotos de su ceremonia en Facebook. Como Paola Desi está discapacitada y tiene dificultades para caminar, Gulinello había delegado un ministro extraordinario para traerle la Eucaristía a su casa. Pero ahora ninguna de las dos mujeres recibirá la Sagrada Comunión en ninguna parte de la diócesis.
"Desafortunadamente, no puedo hacer nada al respecto", dijo Gulinello. "Las conozco y lo siento. No es personal: es una ley de la Iglesia. Estoy siguiendo el Catecismo ".
"Pero esto no significa que el Señor no ame a estas dos mujeres", continuó. "Pueden ir a la iglesia, pero no se les puede dar la comunión".
Gulinello dijo que el "error" de las mujeres fue publicar las noticias de su sindicato en Facebook. Fue visto por "todos" y la comunidad de su iglesia no lo aceptó.
"Incluso el Arzobispo me telefoneó preguntando si esta pareja asistió a la iglesia, y repitió que las puertas están abiertas para ellas, pero que no pueden recibir el sacramento de la Eucaristía".
El arzobispo de Syracusa es Salvatore Pappalardo. (No debe confundirse con el difunto cardenal Salvatore Pappalardo, que era arzobispo de Palermo).
Las uniones civiles para parejas del mismo sexo se introdujeron en Italia en junio de 2016. Según Vox Publica Siciliana, Desi, de Priolo, y Grimaldi, originalmente de Foggia, se encontraron en Facebook hace siete años. Al separarse de su familia, Grimaldi finalmente se instaló con Desi en Priolo. Su ceremonia de unión civil fue conducida por el ahora alcalde de la ciudad, Pippo Gianni.
Desi le dijo a Vox Pública que Don Gulinello sabía que ella y María tenían una relación romántica antes de la ceremonia. Ella afirmó que el sacerdote "había podido ver" la "verdadera naturaleza" de su relación cuando vino a bendecir su apartamento. El ministro extraordinario de la Eucaristía delegado para llevar el sacramento a Paola había llevado a cabo un "encuentro semanal de fe y oración" con ellas, y las mujeres habían querido que esta persona fuera testigo de su unión civil. (NT: tienen razón Desi, los homosexuales activos no pueden comulgar ni antes ni después de estar "casados")
Casarse por una forma de matrimonio, no permitido por la Iglesia Católica Romana, coloca a un católico fuera de la unión sacramental con la Iglesia, lo que significa que no puede recibir la Sagrada Comunión ni el sacramento de la penitencia . Además, la Iglesia Católica Romana reconoce el matrimonio solo como la unión de un hombre y una mujer. Ella enseña que el acto conyugal puede tener lugar solo dentro del matrimonio. También llama a las personas que experimentan deseos del mismo sexo a vivir castamente, "para cumplir la voluntad de Dios en sus vidas y, si son cristianos, para unirse al sacrificio de la cruz del Señor las dificultades que puedan encontrar en su condición" (Catecismo de la Iglesia Católica, 2358).
La Iglesia también advierte contra el pecado de "escándalo". Según el Catecismo de la Iglesia Católica, "una actitud o comportamiento que lleva a otro a hacer el mal". La persona que da el escándalo se convierte en el tentador de su prójimo. Daña la virtud y la integridad; incluso puede llevar a su hermano a la muerte espiritual. El escándalo es una ofensa grave si por acción u omisión otro es deliberadamente conducido a una ofensa grave ".