El cinismo bergogliano ya es preocupante

María Ferraz


Cada día me repugna más abordar las sandeces del pseudo papa, pero aquí hay una más.

Ahora, ante la hecatombe que se le viene encima, propiciada por:


-la petición de Viganò -que está en busca y captura-, de que renuncie por complicidad con los clérigos abusadores, como McCarrick, quien le impuso a Francisco, los cardenales homosexualistas Farrell, Cupich, Wuerl o McElroy, como devolución del favor de haber tramado con otros modernistas su acceso fraudulento al papado,


-la justicia civil que anda destapando las redes homosexuales que atenazan a la Iglesia desde hace décadas gracias a las denuncias de las víctimas, 


-la acusación de los medios seculares de que Fco amparó a clérigos sodomitas y pedófilos desde su época en Argentina y después como papa (obviando la situación de McCarrick o prohibiendo a Müller avanzar en la investigación del violador homosexual Murphy O´Connor, perteneciente a la mafia de sankt Gallen, la cual le catapultó al papado), 


en un acto desesperado de aparecer ante el catolicismo -que aún le respeta por ignorancia, o le idolatra ciegamente o se sirve de él para seguir socavando las enseñanzas de Dios- como un papa tradicional y de fiar, 


después de haberse enfrentado a:


-los católicos tradicionales con sus innovaciones dañinas, entre otras cosas aprobando las directrices de Buenos Aires, después incluidas como Magisterio Ordinario en las Actas de la Sede Apostólica, dando el visto bueno así a la comunión sacrílega a adúlteros primero y después a protestantes, insinuando que situaciones gravemente pecaminosas ya no son pecado mortal, porque Dios no puede pedirnos más, desestimando las correcciones o peticiones de aclaración de laicos, sacerdotes y jerarcas



-a los poquísimos medios católicos que le bombardean sin cesar por sus desmanes sacramentales y su teología globalista-ecologista, por sus alabanzas a abortistas y comunistas, por apoyo suicida de la invasión islámica de Europa, por haber traicionado a los mártires chinos, por tontear con la aceptación de la anticoncepción y la homosexualidad etc 



...Francisco pide que recemos el Rosario, bien, pero, ¿para qué? Para hacer callar a los que le critican, para, según sus palabras, "protegernos de los que dividen a la Iglesia", de los que le atacan a él.


La pregunta es, ¿quién divide a la Iglesia, quién la ataca sino él y su cuadrilla de impostores?


Si  Bergoglio piensa que voy a dedicar mi rosario diario en pedir al Cielo que cierre la boca de Viganò y de otros que se juegan la vida para poner al descubierto las tramas de homosexuales-violadores-satanistas (una realidad que fue desvelada, entre otros, por Malachi Martin quien hablaba de violaciones grupales de clérigos, misas negras, orgías etc en el mismo Vaticano y que corrobora por ejemplo, Marie Frances Toone quien trabajó con la élite del entretenimiento y se codeaba con estrellas del deporte e importantes empresarios, quien fue invitada a casa de una satanista que le hablo precisamente de estas tres cosas y de que la Iglesia sería destruida en 30 años) fuente, puede esperarse sentado




Pero el hombre es tan necio que identifica a Viganò, a las víctimas que salen a denunciar al los clérigos violadores, a los que le instamos a que diga la verdad sobre McCarrick y otros clérigos que él protegió, con el mismo demonio, es decir quiere lanzar al Cielo contra nosotros que somos los malos y él es el que necesita la ayuda de la Madre de Dios y de los ángeles para perseverar en su perverso mandato. 
¿Cabe mayor cinismo y locura?
Pero su petición maquiavélica puede ponerse y se pondrá en su contra, porque ciertamente, la respuesta del Cielo no se hará esperar:

Informa VaticanInsider. La Stampa:

http://www.lastampa.it/vaticaninsider/eng
El Papa: Pido a todos los fieles que recen por la Iglesia atacada por el diablo


El Papa Francisco pide una oración especial en el mes mariano de octubre para pedir protección de aquellos que buscan dividir, y pedir que el mal no prevalezca.


La Iglesia está bajo ataque, y el Papa Francisco, con motivo del día litúrgico para los tres Arcángeles, Miguel, Gabriel y Rafael, pide al pueblo cristiano una oración especial en el mes de octubre. Es una iniciativa que señala cuán preocupado está el Papa Francisco por los escándalos de los abusos contra menores, pero también por los niveles crecientes de los ataques contra el Papa, la Curia, los obispos, de aquellos que diariamente siembran divisiones, odio y desprecio hacia el sucesores de los apóstoles, y favorecen una perspectiva cismática. Los hechos están ahí para que todos puedan ver: la explotación del escándalo de pedofilia, utilizado en las batallas de poder dentro de la Iglesia, las acusaciones contra el Papa, las críticas feroces e implacables contra su persona, lo que sea que diga o haga.


La oficina de prensa de la Santa Sede informa que "el Santo Padre ha decidido invitar a todos los fieles de todo el mundo a rezar el Santo Rosario todos los días, durante todo el mes mariano de octubre, y a unirse en comunión y arrepentimiento, como pueblo de Dios, en pidiendo a la Santa Madre de Dios y a San Miguel Arcángel que protejan a la Iglesia del diablo, que siempre busca separarnos de Dios y de los demás ".


El Santo Padre también ha pedido que se ore el Santo Rosario durante el mes de octubre, y que finalice con la oración de León XIII: "San Miguel Arcángel, (...)

"Las divisiones son el arma más útil para que el demonio destruya la Iglesia desde adentro", dijo el Papa hace dos años. En los últimos días, después de la clamorosa carta del ex nuncio Viganò, que termina con el pedido sin precedentes de la renuncia del Papa, Francisco dijo: "con personas que solo buscan sembrar escándalos y divisiones", ante "perros salvajes" que buscan la guerra y no paz, la única forma es "silencio" y "oración".