Bergoglio prohíbe el proselitismo en Marruecos

María Ferraz

Thompson, el editor en jefe de la web inglesa The Catholic Herald dice en su tuit que las afirmaciones de Francisco son irreconciliables con el mensaje del Evangelio. 

Porque el pseudo vicario, no sabemos ya si de Mahoma o de Jesucristo, ha "advertido a los católicos de Marruecos contra el intento de convertir a otros para aumentar su pequeño número": "Por favor: no (hagan) proselitismo". 

Bergoglio es fiel a su amos y sigue la línea suicida de no hacer prosélitos, esto es, discípulos, en contra del mandato de Jesús: "ID y HACED discípulos de todas las naciones", en este caso la línea del difunto card. Martini, el generador del futuro Papa reformador, o mejor, dilapidador de la Iglesia de Dios.

Thompson dice que una cosa es avisar a los cristianos de los peligros de la evangelización y otra muy distinta, decir que evangelizar está mal.

Bergoglio no pone en guardia a su supuesto rebaño para prevenir los habituales ataques de los musulmanes contra los cristianos, porque ya hemos visto que esto le tiene sin cuidado pues jamás ha denunciado dicha persecución, que tiene lugar no sólo en países de mayoría musulmana sino en la propia Europa. 

Aceptar dichos ataques contradiría lo que él lleva diciendo desde el principio, que el Corán y el Islam no incitan a la violencia, que el Islam es una religión de paz, que el envío de Cristo a evangelizar se puede comparar con la yihad islámica, que si habla de violencia islámica también debe hablar de violencia católica, que el proselitismo es un pecado grave contra el ecumenismo, que no se debe convencer al otro de la propia fe cristiana, que Dios quiere todas las religiones etc


Su único propósito, a una con el obispo de Rabat, es que la población católica acabe por extinguirse.