1 - El primer milagro de la conversión.
El mismo día en que Nuestra Señora le dio el escapulario* a St. Simon Stock, un noble llamado Pedro de Linton lo llamó apresuradamente:"¡Venga rápido, padre, porque mi hermano está muriendo en pecado!"San Simón Stock fue inmediatamente al hombre moribundo. Tan pronto como llegó, lanzó su gran escapulario sobre el hombre, pidiéndole a nuestra Santísima Madre que no dejara de cumplir su promesa. El hombre finalmente se arrepintió y murió en la gracia y el amor de Dios.
2 - Los escapularios que resistieron en la tumba.
Apenas veinticinco años después de la visión en que Nuestra Señora del Carmelo entregó el escapulario a San Simón, el Papa San Gregorio X murió y fue enterrado con su escapulario. Cuando su tumba fue abierta 600 años después, el escapulario aún estaba intacto.Dos grandes fundadores de órdenes religiosas (San Alfonso, de los Redentoristas y San Juan Bosco de los Salesianos) tuvieron una devoción especial a Nuestra Señora del Carmelo y usaron el escapulario marrón. Cuando murieron, ambos fueron enterrados con sus túnicas sacerdotales y sus escapularios.Muchos años después, cuando se abrieron las tumbas, ya se habían consumido sus cuerpos y las túnicas sagradas con las que estaban enterrados, pero el escapulario marrón que cada uno utilizaba se conservaba perfectamente intacto. El de san Alfonso María se expone en Roma en el monasterio que fundó.
3 - El escapulario que calmó una tormenta en el mar.
En 1845, el barco King of the Ocean dejó el puerto de Londres para Australia. Entre los pasajeros se encontraba el pastor protestante inglés James Fisher, con su esposa y dos hijos, de 9 y 7 años. El clima era bueno en las primeras semanas de viaje, pero cuando ya estaba en el Océano Índico, una fuerte tormenta del noroeste barrió el océano. Las olas estallaron furiosamente, las velas se rompieron y, el barco parecía un junco a merced de los vientos y las olas de aquella noche memorable.
Ordenaron a los pasajeros que bajaran a sus cabinas.No había nada que hacer. Había órdenes de mando, gritos de desesperación y súplicas de misericordia. El Sr. Fisher, con su familia y otros, subió a la cubierta y les pidió a todos que se unieran en oración, pidiendo perdón y misericordia.
Había un joven marinero irlandés del condado de Louth, John McAuliffe, que se desabotonó la camisa y se sacó un escapulario del cuello. Lo blandió en forma de cruz y lo arrojó al mar. Pronto las aguas aplacaron su ira, la tempestad se calmó y una pequeña ola envió al joven marino el mismo escapulario que, unos minutos antes, había arrojado al mar. Así que el barco llegó sano y salvo al puerto de Botany.
Las únicas personas que habían notado el gesto del marinero y el regreso del escapulario a la cubierta fueron los pescadores. Con profunda reverencia, se acercaron al joven y le pidieron que explicaran el significado de esas simples piezas de tela marrón, marcadas con las letras BVM. Una vez informados, prometieron abrazar la fe cuyo protector y abogado es la poderosa Virgen del Carmelo, Nuestra Señora, Madre de Jesús. Ya en la ciudad australiana de Sidney, se dirigieron a la pequeña capilla de Santa María, en el lugar donde hoy se alza un templo magnífico, y fueron recibidos en el seno de la Iglesia por el Padre Paulding, más tarde arzobispo.
4 - El escapulario que salvó una casa del fuego.
En mayo de 1957, un sacerdote carmelita publicó un relato asombroso de todo un vecindario de casas en hilera que se habían incendiado en Westboden, Alemania. En una de ellas vivían dos familias piadosas que, al ver el fuego, colgaron un escapulario en la puerta de entrada. En cinco horas, 22 casas se redujeron a cenizas, pero, en medio de la destrucción general, una quedó intacta: la que tenía el escapulario pegado a la puerta. Cientos de personas fueron testigos presenciales de la intercesión de la Santísima Virgen María en esa residencia
5 - El escapulario que el diablo quiso tirar.
Un día, el venerable Francis Ypes notó que el escapulario que solía usar había caído. Cuando estaba a punto de ponérselo de nuevo, oyó una voz demoníaca que le decía:"¡Tira esta capa que arrebata tantas almas del infierno!"El venerable Francis Ypes hizo que el enemigo reconociera que la causa más temida por los demonios es el Santísimo Nombre de Jesús, el Santísimo Nombre de María y el escapulario
6 - El escapulario que salvó a los carmelitas en Tierra Santa.
En 1944, un misionero carmelita en Tierra Santa fue llamado para ministrar el sacramento de la Unción de los Enfermos. El conductor, que era un árabe, lo dejó unos seis kilómetros antes de llegar al lugar porque la carretera era demasiado peligrosa debido al barro en la carretera. Y después de caminar unos cuantos kilómetros, el misionero sintió que sus pies se hundían cada vez más en el lodo, hasta que se deslizó en un pozo de barro y comenzó a hundirse. Inmediatamente recordó a Nuestra Señora y su escapulario; lo besó, miró al monte Carmelo y gritó:“¡Nuestra Señora del Carmelo! ¡Santa Madre! ¡Ayuadame! ¡Sálvame! ”Todo lo que recuerda es que, entonces, se encontró en terreno firme.“Sé que fui salvado por la Santísima Virgen a través de su escapulario marrón. Perdí mis zapatos en ese barro. Estaba casi cubierto de barro, pero logré caminar los tres kilómetros restantes, siempre alabando a Nuestra Señora. ”
7 - El escapulario que permitió a un hombre de confesarse después de ser atropellado por un tren.
A principios del siglo XX, en la ciudad estadounidense de Ashtabula, Ohio, un hombre fue gravemente golpeado por un tren. Sin embargo, en lugar de morir permaneció consciente durante otros 45 minutos, el tiempo que le tomó a un sacerdote llegar y ministrarle los últimos sacramentos.
Nadie entendió cómo era posible que, con heridas tan graves, no hubiera muerto de inmediato. La única explicación estaba colgando alrededor de su cuello: llevaba el escapulario.
8 - El escapulario que salvó la vida de un sacerdote.
Un sacerdote francés había ido en peregrinación cuando recordó que no había traído su escapulario. Aunque sabía que llegaría tarde para celebrar la misa, volvió a recogerlo, porque ni siquiera podía imaginarse en el altar de Nuestra Señora sin llevar el escapulario. Más tarde, mientras celebraba el Santo Sacrificio, un hombre joven se acercó al altar, sacó un arma y disparó al sacerdote desde atrás.Para su sorpresa, el sacerdote continuó celebrando la misa como si nada hubiera pasado.
Los creyentes pensaron al principio que la bala había errado milagrosamente al objetivo, pero luego resultó que se había atascado en el pequeño escapulario marrón
9 - El escapulario que salvó a una joven en la caída de un avión.
En noviembre de 1955, en Guatemala, murió un avión con 27 pasajeros, todos menos una mujer joven, que notó que el avión se estaba cayendo, la agarró del escapulario y le pidió ayuda a la Santísima Virgen de Carmen. Ella sufrió quemaduras graves y su ropa estaba completamente quemada, pero el escapulario ni siquiera fue tocado por las llamas.
*El escapulario de tela marrón se puede sustituirse por una medalla bendecida : en una cara debe estar el Sgdo Corazón de Jesús y en la otra N. Sra del Carmen. Pero es imprescindible que un sacerdote haya hecho previamente la imposición del Escapulario con un escapulario de tela, con el rito correspondiente
Catholic Digest