El intento de denigrar a la Iglesia [al agitar la actual histeria del abuso] apunta a debilitar la importancia de la Iglesia en la sociedad, explicó el arzobispo de Poznan, Stanisław Gądecki, el presidente de los obispos polacos (episkopat.pl, 17 de junio).
La Iglesia polaca se encuentra actualmente en el fuego cruzado de la propaganda de abusos.
Gądecki subraya que los informes [parciales] de los medios de comunicación sobre casos aislados de abusos han provocado actos de violencia contra sacerdotes y profanaciones de iglesias. Agrega que el juicio mediático contra la Iglesia sugiere que no hay personas justas en la Iglesia y que la fe es hipocresía.
Gądecki dice que aquellos que simpatizan con las víctimas de abuso sexual deben promover la castidad en nuestra cultura como parte de un enfoque holístico porque las diferentes formas de inmoralidad sexual están interrelacionadas.
La mejor manera de contener los delitos sexuales es, por lo tanto, observar el Sexto Mandamiento.
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