El Sumo Pontífice está mintiendo descaradamente a todo el mundo para encubrir sus malas acciones -
Por el arzobispo Carlo Maria Viganò
Es inmensamente triste leer las respuestas del Papa Francisco sobre el caso de McCarrick, por no mencionar todo lo demás. Primero dice que ya ha respondido muchas veces; segundo, que no sabía nada, absolutamente nada sobre McCarrick, y tercero, que olvidó mi conversación con él. ¿Cómo pueden estas afirmaciones ser afirmadas y sostenidas juntas al mismo tiempo? Todas ellas son mentiras descaradas.
Primero, durante nueve largos meses, no dijo ni una palabra sobre mi testimonio, e incluso se jactó y continúa haciéndolo sobre su silencio, comparándose con Jesús. Entonces, ¿habló o se calló?.
En segundo lugar, todos sabían sobre el comportamiento depredador de toda la vida de McCarrick, desde el seminarista más joven de Newark hasta los prelados de mayor rango en el Vaticano.
Tercero, repito frente a Dios lo que dije en mi testimonio del agosto pasado: el 23 de junio de 2013, el mismo Papa Francisco me preguntó sobre McCarrick, y le dije que había un gran expediente sobre sus abusos en la Congregación de Obispos y que corrompió a generaciones de seminaristas. ¿Cómo podría alguien, especialmente un papa, olvidar esto? Si realmente no sabía nada hasta ese día, ¿cómo podría ignorar mi advertencia y seguir confiando en McCarrick como uno de sus asesores más cercanos?
Estamos en un momento verdaderamente oscuro para la Iglesia universal: ¡el Sumo Pontífice ahora está mintiendo descaradamente a todo el mundo para encubrir sus malas obras! Pero la verdad eventualmente saldrá a la luz, sobre McCarrick y todos los demás encubrimientos, como ya ha ocurrido en el caso del cardenal Wuerl, quien tampoco "sabía nada" y tenía "un lapso de memoria".
Insto a todos los fieles a orar fervientemente y hacer penitencia por el papa Francisco, que parece estar en las garras del "padre de la mentira".
¡Que el Señor tenga misericordia de todos nosotros!
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