Arriba: Juan Pablo II y Paola Bonzi, quien salvó a más de 22,000 bebés del aborto)
Abajo: Francisco y Emma Bonino, quien abortó personalmente a más de 10,000 bebés
En su columna que no debe perderse, Antonio Socci (...) sugiere, si fuera posible, la iglesia se dirige hacia cero absoluto en términos de su energía apostólica y su misión en el mundo.
Síntoma de la "muerte por calor" aparentemente inevitable (pero divinamente reversible) del elemento humano de la Iglesia es su continua absorción de los asuntos mundanos y su subordinación voluntaria al orden político en general.
A este respecto, la columna más reciente de Socci señala que los medios de comunicación italianos han elogiado enormemente a Carola Rakete, la capitana alemana que atracó un cargamento de "refugiados" ilegales y en su mayoría jóvenes varones en Lampedusa, violando la ley italiana, mientras que, al mismo tiempo, los medios de comunicación ignoran la figura verdaderamente heroica de Paola Bonzi, la activista pro-vida italiana que ha salvado a 22.702 niños inocentes del aborto al ayudar a sus futuras madres."Nunca he conocido a una madre que lamentara no haber tenido un aborto", explicó a Socci.
Sin embargo, Socci señala con mordacidad justificada que no es Bonzi, sino Emma Bonino, de nombre similar irónicamente, quien se jacta de haber realizado personalmente miles de abortos con una bomba de bicicleta, a quien el Papa Francisco elogia y recibe en audiencias privadas.
Juan Pablo II otorgó su bendición personal a Bonzi durante una audiencia privada (arriba). Pero la heroína pro-vida Bonzi, escribe Socci, es "una figura no digerible para la iglesia bergogliana actual, que es el apéndice clerical del establishment mundano". Sin embargo, en febrero de 2016, Francisco elogió a Bonino, una asesina en masa de niños no nacidos, como "una de las grandes olvidados de Italia hoy".
En una entrevista reciente referida por Socci, Francisco declaró que "Europa no debe dividirse", se refiere a la tiránica Unión Europea, y que lo que él llama "populismo", un movimiento para preservar la identidad nacional contra la marea de la inmigración ilegal no controlada, está siendo impulsado por "discursos que se parecen a los de Hitler en 1934". Nosotros primero. Nosotros ... Nosotros ... "Estos son pensamientos aterradores", dijo Fco. Una referencia flagrante tanto a Donald Trump como a Matteo Salvini, a quien este Papa compara con un maníaco genocida.
Y fue Fco, como los medios de comunicación estaban encantados de airear, quien ordenó al Vaticano que donara $ 500,000 al Óbolo de san Pedro para subsidiar la "caravana" de "migrantes" varados en México durante su intento, organizado por la izquierda, de asaltar la frontera de los Estados Unidos.
¿Cuál es el "mayor temor de Francisco respecto al planeta"? No el castigo divino debido a la apostasía de la civilización, sino más bien "la desaparición de la biodiversidad, las nuevas enfermedades letales, la devastación de la naturaleza que podrían conducir a la muerte de la humanidad".
En términos de física, "muerte por calor" se define como el proceso por el cual, en un sistema cerrado, "la entropía aumenta progresivamente hacia un valor máximo y todas las partes entran en equilibrio térmico a una temperatura uniforme". Por analogía, la Iglesia en su elemento humano está alcanzando una especie de equilibrio térmico con el mundo circundante, convirtiéndose lentamente en indistinguible del mundo en términos de sus preocupaciones y actividades.Pero la Iglesia no es un sistema cerrado, ni una organización meramente humana.
Su poder proviene del Espíritu Santo y garantiza la renovación de la Iglesia incluso en los peores momentos, como lo prometió Cristo mismo.
La Iglesia sobrevivirá incluso al peor de los pontificados, incluso a este pontificado. Tal es la promesa y la esperanza expresadas en el Mensaje de Fátima.
https://fatima.org/author/fatima-ferrara/