Los preceptos de la Iglesia Católica son las acciones mínimas requeridas de los católicos con respecto a la Iglesia.
La Iglesia usa estos preceptos para recordarnos que la vida cristiana requiere un compromiso con la oración y la participación activa en la liturgia y los sacramentos. Si caemos por debajo de este nivel mínimo, no podemos considerarnos en plena comunión con la Iglesia Católica.
Cada uno de estos preceptos de la Iglesia Católica es un requisito. Junto con los Diez Mandamientos, representan el nivel mínimo de vida moral. La violación intencional de los preceptos o los mandamientos es un asunto grave, es decir, un pecado mortal.
PRIMER PRECEPTO: ASISTIRÁS A MISA LOS DOMINGOS Y LOS DÍAS FESTIVOS DE OBLIGACIÓN Y DESCANSARÁS DEL TRABAJO SERVIL.
Debemos "santificar el día que conmemora la Resurrección del Señor" (domingo), así como los principales días festivos, conocidos como días de obligación católica. Esto requiere asistir a la misa, "y descansar de aquellos trabajos y actividades que puedan impedir la santificación de estos días".
...¡SOBREPASA EL MÍNIMO!
Recordemos siempre: los preceptos de la Iglesia Católica son niveles mínimos de participación en la vida de la Iglesia. Por amor a Cristo y por el deseo de avanzar en la vida espiritual, normalmente se ha de procurar hacer mucho más de lo que requieren.
Mucha gente recomienda a los católicos:
Asistir a misa al menos una vez más a la semana. (¡La mayoría de las parroquias celebran misa todos los días del año!)
Cuando el amor divino embellece nuestras almas y nos hace agradables a su Divina Majestad, eso se llama gracia; en la medida en que nos da fuerzas para hacer el bien, se llama caridad; pero cuando alcanza tal grado de perfección que nos hace no sólo hacer el bien, sino hacerlo con cuidado, frecuencia y prontitud, entonces se llama devoción.
-San Francisco de Sales
https://www.romancatholicman.com/first-precept-you-shall-attend-mass/