Un acto de esperanza para repetir



Cuando el mundo parece desmoronarse a nuestro alrededor, puede ser fácil caer en la desesperación. Quedan pocas cosas que nos traigan alegría y no sabemos si algo bueno volverá a suceder.
Sin embargo, es precisamente durante esos tiempos oscuros que necesitamos poner nuestra esperanza en Dios.

El Catecismo de la Iglesia Católica describe la esperanza como una "virtud", explicando cómo consiste en "poner nuestra confianza en las promesas de Cristo y confiar no en nuestras propias fuerzas, sino en la ayuda de la gracia del Espíritu Santo" (CIC 1817).

Una forma de fomentar la esperanza en nosotros es rezar frecuentemente un corto "acto de esperanza" a lo largo del día. Esto llama a la gracia de Dios para inundar nuestra alma con una esperanza sobrenatural que perdurará.

He aquí un ejemplo de un acto de esperanza, que puede ser memorizado y rezado a menudo.

Dios mío, confiando en tu infinita misericordia y bondad, y reconociendo que siempre eres fiel a tus promesas, pongo toda mi esperanza en ti. ¡Mi vida está en tus manos!


P Kosloski