La luz de la vela pulsante a semejanza del fenómeno del sol de algunas apariciones marianas.
Desde Japón, Angélica nos ha compartido estas imágenes. Ella es una colombiana casada en santo matrimonio con un japonés y con tres hijos, que tuvo una gran conversión e influencia en su marido. Mientras oraba como cada día, uniéndose al canal ORACIÓN, FORMACIÓN Y ACCIÓN CATÓLICA, con personas de todo el mundo, observó un fenómeno único, llamativo (nunca mejor dicho) en su vela. Algo que hacía años no le pasaba o veía. Otras veces lo quiso grabar y no pudo, porque al grabar no ocurría nada. Ahora pidió permiso al cielo, y lo pudo grabar y lo quiso compartir. Entendemos que es un signo de aliento para que sigamos orando con constancia y fuerza, con mucha fe, por la Iglesia y la salvación de muchos, en estos tiempos de gran apostasía.