Erdoğan invita a Fco a visitar la "mezquita" Santa Sofía



María Ferraz

Erdogan ha hecho suyo el mantra de Francisco sobre un deseado diálogo interreligioso, más explícito en la famosa Casa Abrahámica que une indiscriminadamente a las tres religiones monoteístas en base a la declaración de Abu Dhabi según la cual "Dios quiere todas las religiones"; aunque este mismo Dios enviara a Su Hijo a la Cruz para redimirnos después de fundar la Iglesia Católica como medio de salvación, cosa que Bergoglio ignora frente a los infieles pues no le parece relevante. 

Por lo que el turco deduce que a Dios no le importa si se le reza a Alá o a Jesucristo, y tiene la desfachatez de humillar todavía más al supuesto vicecristo, más incluso que cuando éste se tiró de bruces a besar el calzado de ciertos políticos africanos, y le ha invitado a visitar la exbasílica convertida ya en mezquita en la que a estas horas se honra a un falso dios. 

Pero, ¿qué supondría eso después de la mediática veneración y entronización del ídolo pachamámico en la mismísima basílica vaticana?

Y aquí Fco tendría un pretexto formidable para demostrar al mundo que verdaderamente es un líder religioso abierto de mente, conocido por prohibir el proselitismo cristiano y así estaría dispuesto a besarse con el dirigente musulmán turco después de darle (no a Fco sino a toda la cristiandad) una sonora bofetada.

Por otra parte, Bergoglio no parece que vaya a complacer a la presidente griega quien le ha pedido ayuda para defender, de los excesos del imperialismo islamista, la Basílica de Santa Sofía. 

Fco está en una posición difícil intentando nadar entre dos aguas por su estudiada ambigüedad con la que ha querido menospreciar la primacía de la religión verdadera sobre las demás religiones, tratándola como si fuera un credo de origen humano y no divino. 

Se lo merece.


Informa Breitbart:

ROMA - El presidente turco Recep Tayyip Erdoğan ha invitado a Francisco a visitar Santa Sofía, que volverá a ser una mezquita a tiempo completo el 24 de julio.

El portavoz presidencial turco İbrahim Kalin dijo el domingo que el Papa Francis está entre los invitados a asistir a la ceremonia de reapertura de Santa Sofía como mezquita el próximo viernes.

El 10 de julio, el Presidente Erdoğan firmó un decreto que re-designa a Santa Sofía como una "mezquita en funcionamiento", revirtiendo la decisión de 1934 del Consejo de Ministros turco, dirigido por el fundador secular de Turquía, Mustafá Kemal Ataturk, que convirtió la estructura del siglo VI en un museo.

Construida como basílica cristiana bajo el emperador bizantino Justiniano en el año 537 d.C., Santa Sofía fue la sede principal de la iglesia ortodoxa oriental durante siglos, pero se convirtió en una mezquita imperial tras la conquista otomana de Constantinopla en 1453, la ciudad que hoy en día es Estambul.

La semana pasada, el Papa Francisco expresó que estaba dolido por la decisión de Turquía de convertir Santa Sofía en una mezquita.

"Y el mar me lleva un poco más lejos en mis pensamientos: a Estambul. Pienso en Santa Sofía, y estoy muy triste", dijo.

Los obispos europeos dijeron que convertir a Santa Sofía en una mezquita "aleja a Turquía de Europa y es un golpe a la Iglesia Ortodoxa y al diálogo interreligioso".

El Consejo Mundial de Iglesias, que cuenta con 350 iglesias como miembros, escribió una carta al presidente de Turquía pidiendo que se revocara la decisión.

"Al decidir convertir de nuevo a Santa Sofía en una mezquita, usted ha revertido esa señal positiva de apertura de Turquía y la ha convertido en una señal de exclusión y división", decía la carta. "Lamentablemente, esta decisión también se ha tomado sin previo aviso o discusión con la UNESCO en relación con el impacto de esta decisión en el valor universal de Santa Sofía reconocido en la Convención del Patrimonio Mundial".

Las autoridades turcas han dicho que no destruirán los mosaicos cristianos y otras imágenes que decoran el interior del templo.

"Estamos haciendo algunos arreglos para asegurar que durante las oraciones musulmanas, los mosaicos serán cubiertos pero no tocados", dijo el Sr. Kalin.
"El punto principal aquí es que no hay ningún daño a estos mosaicos, representaciones, la textura histórica y la arquitectura del edificio", dijo.

Kalin también dijo que Santa Sofía seguirá estando abierta a los creyentes o no creyentes de cualquier religión. "Las reacciones a la conversión de Santa Sofía se basan en viejas opiniones y prejuicios - hay libertad religiosa en Turquía", dijo.

Hasta ahora el Vaticano no ha hecho ningún comentario público sobre la invitación al Papa Francisco para visitar a Santa Sofía.