El padre Cuesta es misionero mariano perseguido por el card Rubén Salazar, quien hundió la Asociación de los Misioneros Marianos que él fundó. Más miembros del clero lo maltrataron, dentro y fuera de Colombia (Los Ángeles).
Los bergoglianos expulsan a todos los sacerdotes fieles que pueden como se está viendo últimamente (Minutella, el Padre Chabelo...) y ahora le han hecho la vida imposible al Padre Cuesta