La escandalosa entrevista al card Maradiaga



Estimado Tosatti, permítame hacer un comentario después de leer la sorprendente, escandalosa y hasta ridícula entrevista del Cardenal Oscar Maradiaga en la Repubblica de hoy en la página 11.

Maradiaga dice que el Papa está cansado de que la gente guarde "cofres del tesoro" en el Vaticano y "ha querido reformar las finanzas durante años". (? - ¡Oh sí, está tan claro que él quería esto!)

Cuando se le pregunta si es cierto que el Papa está aislado, Maradiaga responde "absolutamente no, porque dirige la Iglesia de manera colegiada, pidiendo opiniones y luego decidiendo". (¿Está bromeando?)

Cuando se le pregunta si las decisiones de Bergoglio están dictadas por su estado de ánimo, Maradiaga responde, "Francisco tiene una gran paciencia y misericordia; nunca actúa por instinto... sino sólo después de discernir". (¡Increíble!)

Cuando se le pregunta qué piensa sobre la llegada de Pompeo al Vaticano, Maradiaga responde, "...él está buscando la reelección de Trump...no los intereses del pueblo americano."

Luego agrega, escandalosamente, "Hay una red anti-Francisco. Los dos hombres que forman esta red son Steve Bannon y Carlo Maria Viganò. Quieren que todo permanezca como siempre, [tienen] una rigidez que no es buena para la iglesia." (¡Ah no! Querido Oscar, esto no se debería haber dicho...)

Concluye, refiriéndose a la (supuesta) historia financiera de Becciu, explicando que el Papa pidió a la ONU la abolición de los "paraísos fiscales". (De nuevo, ¿está bromeando? El único paraíso fiscal que sigue funcionando está controlado por él!).

Para explicar por qué esta entrevista me pareció tan escandalosa, quisiera decirles dos o tres cosas sobre Maradiaga, el primado de Honduras, arzobispo de Tegucigalpa, que desde 2013 es el coordinador del "Consejo de Cardenales" nombrado por Bergoglio.

Oscar Maradiaga es, sin duda, el cardenal más controvertido de Bergoglio.

Su lista de "méritos" para este título comienza con las acusaciones de que apoyó el golpe militar de 2009 con la excusa de evitar la guerra civil.

Continúa con las acusaciones de que estuvo involucrado en más escándalos financieros en 2012.

Continúa ininterrumpidamente gracias a las denuncias de más escándalos que él provocó, relatados por la esposa del ex embajador de Honduras ante la Santa Sede: "Dinero, negocios, inversiones... (incluyendo bienes raíces en Londres)".

Otros, incluyendo la mujer del embajador, lo acusaron de haber encubierto a su mano derecha, el obispo Pineda, por comportamiento obsceno y abuso de sus seminaristas (Bergoglio despidió posteriormente a Pineda).

En 2017 se encontraba en el centro de otro escándalo financiero cuando salió a la luz que, mientras predicaba sobre la pobreza y luchaba contra la injusticia, recibía 35.000 euros al mes (500.000 al año) de la Universidad de Honduras. En ese momento L'Espresso escribió que el Papa quería la verdad y habló de "traidores y aprovechados en la iglesia".

Tanto es así que se pensó que Maradiaga estaba acabado... ¡pero no!

En 2018, este hombre que ha sido repetidamente encubierto y protegido por el Papa fue a todos los periódicos denunciando al arzobispo Viganò por su comportamiento anti-Bergoglio al exponer el caso McCarrick.

En junio de 2019 nuestro Tosatti escribió un artículo en La Nuova Bussola en el que relataba que en el aeropuerto de Tegucigalpa Maradiaga fue casi linchado por una población cansada de sus malvados negocios.

Y sin embargo este hombre continúa - mientras que todavía mantiene todas sus oficinas, dinero y poder - pontificando a la Repubblica sobre lo que está bien y lo que está mal, quién es bueno y quién es malo, incluso explicando lo que es bueno para los americanos, besando a Bergoglio de una manera repugnante y diciéndonos que el mismo Bergoglio pidió a la ONU el cierre de los paraísos fiscales. Pero la ONU sí pidió que se cerraran, incluyendo aquellos dentro de la estructura financiera de la Santa Sede, después del ataque a las Torres Gemelas en 2001. ¿Y se hizo?


Damas y caballeros, amigos de Stilum Curiae, espero que esto no les suceda a ustedes, pero si el Papa Bergoglio continúa como Papa por otros 10 años, en 2030 todavía estaremos leyendo en Repubblica que "el Papa Bergoglio no se detiene, no retrocede en el impulso de las reformas, aunque sea obstruido por todos sus traidores y aprovechados". Y aún en 2030, Maradiaga, que para entonces tendrá 87 años, dirá: "Usted, un Papa tan paciente y misericordioso, no merecía ser tratado de esta manera..."

Y Rafael Brotero se verá obligado a escribir durante los próximos diez años: "Pobre Santo Padre, esta vez también le han engañado…"


https://www.marcotosatti.com/author/wp_7512482/