Carbonia, 30 de enero de 2021
La tremenda hora de la gran prueba se acerca.
Cuidado hombres, estáis a punto de asistir a la mayor ruina de la historia de la Iglesia.
El Diablo está enfadado, su ansia es grande, os respira en la nuca, quiere haceros sus esclavos. Velad, rezad el Santo Rosario, dedicándolo a las intenciones de la Santísima Virgen.
La Iglesia en la tierra verá su caída, su encanto se perderá, es la última locura de Satanás, sabe que su plan ya ha fracasado, pero en su orgullo sigue adelante; ha conseguido atraer a muchas almas hacia sí, pero Dios pondrá a su criatura en condiciones de arrepentirse porque enviará un gran desastre sobre ella: ... ... entonces gritará el nombre de Jesús para su ayuda.
Jesús llevará a su Iglesia de vuelta a sí mismo y la hará brillar con su amor, en su luz caminará porque él la guiará.
¡Estáis cerca del Aviso! Tened cuidado, hijos míos, que vuestro corazón esté en mí, fiel a mi verdadera Iglesia.
Hijos míos, muchas serán las catástrofes que ahora se sucederán una tras otra sin tregua, el hombre tendrá que darse cuenta de que sin Dios no puede hacer nada, tendrá que clamar por ayuda. Dios escuchará el clamor de sus hijos y los pondrá en condiciones de salvarse.
Cuando todo lo que las profecías han anunciado suceda en la Tierra, en verdad, sabed que el regreso de Jesús está a la vuelta de la esquina.
Una gran catástrofe está a punto de ocurrir en Italia, muchos serán sorprendidos mientras duermen.
Pido la conversión de esta Humanidad. Daos la oportunidad de salvaros, oh hombres. Confiad en mí. Enviaré a Mis Ángeles para que os ayuden; os guiarán a Mis refugios donde seréis protegidos y curados de todo mal. Estos refugios serán muchos en la Tierra; quienes los habiten serán llamados por Dios.
Turín debe ser sometido a una condición de castigo. Roma va a ser golpeada por el adversario. Florencia es caer en el fango de la muerte.
Los malvados vagan por el mundo, en su astucia lograrán apoderarse de muchas almas alejadas del Amor. ¡Estad atentos, hombres, estad atentos! Se acerca la hora terrible de la gran prueba: los que se refugien en Mí estarán a salvo, mientras que los que me hayan negado caerán en la red del Diablo.
Todavía retumba mi dolor por esta Humanidad infiel a Mí, pido la gracia de todos Mis fieles de rezar para que muchos vuelvan al Padre.
Hijos míos, os espero a todos convertidos, no seáis tontos, la verdad está en mí. "No os burléis de estas palabras mías" que son la salvación para vosotros.Vamos, todo está a punto de transformarse, las cosas de antes nunca volverán: ... Aquellos que desean ser salvados deben volver rápidamente a Aquel que es la Salvación.
La Santísima María está ahora entre vosotros, su manto os cubre, os protege del mal.
Rivelazioni dal
COLLE DEL BUON PASTORE