Seréis advertidos por el Padre Pío, del inminente Aviso



Revelaciones desde la 
COLINA DEL BUEN PASTOR


Carbonia. Italia, 8 de julio de 2020


He aquí, Mi Jardín Celestial está abierto para vosotros, Mi Nuevo Pueblo, Mis elegidos, los que lo heredarán de Mí para siempre.

Yo soy el que creó todo, Yo soy el que baja del Cielo para poner fin a esta Humanidad incivilizada y malvada; Yo vengo con Mi vara para poner orden donde ya no lo hay.

Me duele esta humanidad que no se ha arrepentido, que no ha querido volver a su Dios, por su propia voluntad; estoy cansado de toda la maldad de este pueblo.

No esperaré más, lo he dicho y lo repito: abro el Cielo para descender hasta vosotros, Mi pueblo, a vosotros que me anheláis día y noche, vosotros que deseáis ardientemente uniros a vuestro Padre del Cielo, vosotros que con todo vuestro corazón queréis pertenecer para siempre a vuestro Dios Creador, vosotros que queréis volver a la Casa del Padre.

Estoy con vosotros en esta Colina donde pronto brillará la Cruz en el Cielo, donde Yo, Dios, enviaré ríos de gracias a todos aquellos que reconozcan este Lugar en Mí y que se arrodillen ante Mí.

He llamado y convocado a Mi pueblo a la verdadera conversión, a reparar sus pecados, pero sois duros de corazón. Su andar está en el mundo, en las cosas de un mundo que se acaba.

Convertíos oh hombres, convertíos ahora, no acumuléis tesoros en la Tierra porque todo se perderá, vuestras posesiones se perderán, todo será incinerado por el fuego que enviaré desde el Cielo para la gran purificación.

No me atrevo a pensar en lo que tendréis a cambio de vuestro dios, del que habéis elegido seguir en Mi lugar, ... No me atrevo, para no sufrir más, ... pero esta fue vuestra elección.

Como Padre y como Dios, vengo a redimiros, vengo a pediros la gracia de salvaros, dejaos salvar, hijos Míos, os amo infinitamente ya que soy vuestro Creador, he trabajado por vuestro bien con todo Mi ser, pero me habéis traicionado para seguir a aquel cuya seducción os alejó de Mí.

Pequeños míos, qué daño habéis creado, no habéis tenido firmeza en Mí, habéis dicho de repente sí al enemigo, a la Serpiente Antigua, la que quería alejaros de Mí.

Estamos en el ajuste de cuentas, Dios dice su basta e interviene para recuperar todo lo que le pertenece y acabar con el enemigo.

Satanás es feroz, su desprecio por Mis hijos es grande, codicia sus almas pero no todos caerán en su trampa, su plan ahora ha fracasado, ya sabe que caerá en su infierno maldito para siempre.

Cuando la Tierra sea purificada de todo mal, he aquí que pondré a Mis Ángeles como guardianes. Estoy a punto de abrir el nuevo mundo, los nuevos cielos y la nueva tierra, abriré a Mis hijos Mi nuevo Edén, el nuevo Paraíso en la Tierra, y allí, cobijaré a todos aquellos que me habrán servido, amado, adorado y seguido como Yo lo exigí en el respeto de Mis Leyes.

La grandeza está sólo en Mí, en tenerme como Padre y como Dios para vosotros. Yo soy lo más grande, no hay nada más grande que Mi Amor, que pertenecer a Mí.

Pronto obraré en mis elegidos, los pondré en una nueva condición, grabaré sus corazones con fuego y los enviaré como apóstoles de los últimos tiempos para recuperar a los perdidos. El Espíritu Santo descenderá sobre ellos y serán grandes en su misión en Mí, porque Yo guiaré sus pasos, dirigiré su camino.

¡Pobre de vosotros, que me habéis dado la espalda! En verdad, os pido que os enmendéis rápidamente, porque el tiempo se ha acabado, de repente Mi intervención se producirá y será demasiado tarde para vosotros, no os reconoceré como lo hicisteis Conmigo.

Haré milagros a través de Mis apóstoles, los pondré en el mundo para iluminar a la gente y traerla de vuelta a Mí; serán Míos en calidad e imprimirán en los corazones perdidos el amor por Mí, el Único y Verdadero Dios. ¡El Creador! No hay otro Creador más que Yo, Yo soy el que creó todo de la nada, y Yo incineraré todo lo que no Me pertenece.

Seréis tan bellos como el Sol y brillaréis con una luz que no conocíais, seréis alegres y seréis Míos para siempre. Hoy, el Cielo ordena el amor, la caridad hacia el prójimo y el máximo respeto a los Mandamientos de Dios.

Estamos en el final, estoy a punto de anunciarme al mundo a través de mis santos: ¡seréis advertidos por mi humilde servidor, el Padre Pío, del inminente Aviso! El Anticristo ya está preparado, su sillón le espera, pero no sabe que se encontrará ante Aquel que es el único digno de sentarse en ese sillón. Su tiempo será muy corto, resucitaré para Mí a todos Mis hijos y los deleitaré en Mí para que nada pueda suceder a Mis elegidos.

Os amo infinitamente, hijos míos; os conduzco a la victoria.

María ya está con vosotros en la tierra; pronto llamará a vuestros corazones y se manifestará en vuestros hogares como Madre de la salvación para que ningún hijo de Dios se pierda.

Susurrando con amor, te dará la posibilidad de arrepentirte, para volver a su Hijo Jesús.

La ola que envolverá la tierra será enorme, arrastrará con ella todo lo que encuentre a su paso, y en las profundidades del mar todo se perderá. No seáis tontos, Dios es Dios, es el único que puede salvaros. Poneos en dirección a Mí, oh hombres.

La hora es tardía, todo está consumado, Dios debe intervenir ahora. Amen Bendición y gracia para ti.


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