Diputada australiana: "La vida de los no vacunados será muy difícil INDEFINIDAMENTE
Nunca se trató de una opción o de la salud pública.
La diputada australiana Gladys Berejiklian advirtió que la vida de los ciudadanos no vacunados seguirá siendo "muy difícil" mucho después de que el gobierno levante sus restrictivos cierres de COVID.
Berejiklian, la primera ministra de Nueva Gales del Sur, hizo la draconiana proclamación en una entrevista el lunes en el programa de entrevistas "Sunrise" de 7News Australia al anunciar el levantamiento de los bloqueos el 1 de diciembre.
"Muchas organizaciones ya tienen políticas de vacunas obligatorias", dijo Berejiklian. "Y aunque el gobierno está diciendo que las personas no vacunadas podrían tener otros derechos a partir del 1 de diciembre, muchas aerolíneas han dicho que no transportarán a nadie que no esté vacunado. Muchos negocios han dicho 'no recibiremos a nadie que no esté vacunado'".
"Permítanme ser muy clara: la vida para los no vacunados será muy difícil indefinidamente", declaró Berejiklian a 7News Australia, añadiendo que "9 de cada 10 adultos" en Nueva Gales del Sur ya se han vacunado.
Esto se produce sólo dos días después de que el jefe de la sanidad pública australiana, el Dr. Kerry Chant, declarara que la vida NUNCA "volverá a la normalidad" después de la COVID, independientemente del estado de vacunación.
"Quiero subrayar: nunca tendremos que volver a los tiempos anteriores a la COVID", dijo Chant. "Siempre tendremos que ser conscientes de que COVID existe, vamos a tener que comprometernos con las vacunas de refuerzo, vamos a tener que asesorarnos de vez en cuando cuando veamos brotes. Vamos a tener que responder. Por lo tanto, no va a volver a la normalidad. No podemos negar que vamos a tener que vivir con COVID".
"Pero tener esos niveles de vacunación tan elevados nos permitirá tener unas restricciones más mínimas o unas medidas de salud pública más mínimas a medida que vayamos navegando por los años futuros con el COVID", añadió.
Por su parte, el Comisionado de la Policía de Nueva Gales del Sur se ha negado a aplicar el mandato del pasaporte de vacunas del estado, revelando que los agentes no comprobarán el estado de vacunación de las personas en restaurantes, clubes o bares.