Carbonia 14 de marzo de 2016
¡La comedia ha terminado! ¡La hora de la derrota de los malhechores ha llegado! ¡La agonía de la iglesia terrenal será grande por los traidores ! ¡El final de los tiempos está entrando ahora!
Vengo a vosotros, hijos míos, a vosotros que aún no os habéis convertido. Vengo a traeros mi ayuda, escuchadme y seguidme como os pido, pues todo está cumplido.
Vuestro Padre aún os llama a la verdadera conversión: todo está cayendo, oh hombres, la Tierra sufrirá su transformación, Mi grito se escuchará en todas partes.
Hijos míos, oh vosotros que me seguís con verdadero amor, ayudadme a salvar a esta humanidad incrédula y perversa.
No sigáis en vuestra iniquidad, oh hombres, no os perdáis en manos del enemigo, su objetivo es sólo destruiros junto con el planeta en el que vivís.
Mi Crucifixión está cerca, el torturador está en su acto abominable, su deseo es tomar mi lugar pero esto no sucederá, él se glorificará por un corto tiempo porque nunca, jamás podrá tomar mi lugar.
Hijos míos, oh todos vosotros que procedéis según mi Santo Evangelio, he aquí que vengo a terminar con vosotros esta historia de pecado y vengo a daros una nueva vida en mí. La nueva primavera está a punto de llegar para vosotros, vuestro Dios viene a acogeros en sí mismo, seréis regados y saciados en su seno y lo poseeréis porque participaréis en él.
Ofrecedme vuestro "sí" porque ha llegado el momento de bajar el telón de este pozo negro; la mentira terminará su tiempo, porque la Verdad entrará en el mundo por derecho propio y será el fin de todo lo que no le pertenece.
Tocad, tocad las trompetas con todas vuestras fuerzas, hijos míos, soplad, soplad en ellas para que todos oigan que todo se ha cumplido, que el tiempo de la alegría ha llegado para los hijos de Dios, para todos aquellos que con paciente amor han seguido y respetado sus mandamientos.
¡La hora del Aviso está cerca!
Sonad, sonad, arpas y cítaras, porque he aquí que Aquel que es el Rey del Universo viene del Cielo, viene a llevarse a sus hijos con Él, viene a cerrar las puertas de la mentira, viene a abrir las puertas de la vida verdadera a todos los suyos.
La hora de la Justicia Divina ha llegado, todo debe ser remediado para que nada se pierda. Aquellos que han amado y servido a Aquel que es el Único y Verdadero Dios con absoluta fidelidad tendrán sus vidas salvadas y podrán disfrutar de todas Sus Gracias, pero aquellos que se han vuelto contra Él no podrán acceder a Sus Gracias.
Los tiempos finales están llegando, la conducta de Mis consagrados hace llorar a Mi Sagrado Corazón, su destrucción está llegando, ¡Mi Mano los quemará!
¡La comedia ha terminado! ¡La hora de la derrota de los malhechores ha llegado! La agonía de la iglesia terrenal será grande, pues los traidores ya han lanzado su piedra contra Aquel que salva.
Llorad, incrédulos, esta es la hora de vuestra derrota; creíais que ibais a salir victoriosos, pero os encontraréis en el infierno.
¡Tocad las trompetas! Que se abran las filas, porque ¡he aquí que vengo!
Alegraos, hijos míos, vuestro día comienza de nuevo con mi llegada.
¡Padre e Hijo y Espíritu Santo!