Mi Santa Eucaristía debe seguir siendo recibida por vosotros. No debéis dejar vuestro Sacrificio diario, ya que no seréis vosotros los que os veáis obligados a tomar esta decisión
Miércoles, 27 de febrero de 2013
Mi querida hija, las Misas diarias continuarán por algún tiempo y exhorto a todos mis seguidores a seguir asistiendo a ellas, como antes.
Mi Santa Eucaristía debe seguir siendo recibida por vosotros.
No debéis dejar de hacer vuestro sacrificio diario, ya que no seréis vosotros los que os veáis obligados a tomar esta decisión.
Se declarará que (la Misa) se convertirá en un tipo diferente de sacrificio a Dios y lo sabréis, al instante, cuándo suceda, pues la práctica de la santa misa será detenida por el Falso Profeta.
En lugar de la santa Misa habrá un ritual pagano de un solo mundo (globalista), y vosotros, Mis amados seguidores, bendecidos con el don del Espíritu Santo lo reconoceréis, por lo que será.
Nunca jamás debéis abandonar la Iglesia que di al mundo, la cual está basada en Mis Enseñanzas, y en el sacrificio de Mi Muerte en la cruz, presentada a vosotros con los dones más sagrados.
Vosotros, Mis amados seguidores, sois Mi Iglesia.
Mis amados sacerdotes y clérigos, bendecidos con el don del Espíritu Santo, nunca me abandonarán.
Tampoco os abandonarán a vosotros.
Y así, Mi Iglesia seguirá viviendo, ya que nunca podrá morir.
La Iglesia es Mi Cuerpo en la Tierra, y por lo tanto, nunca puede ser destruida.
Sin embargo, será aplastada, atormentada y desechada y luego dejada en el desierto para que muera.
Todo intento de destruir hasta el último resquicio de vida será hecho por mis enemigos, pero Mi Iglesia se levantará de nuevo.
Pero recordad que nunca morirá, aunque pueda parecerlo.
Mi Iglesia en la Tierra será reducida en tamaño y se convertirá, sin culpa suya, en el ejército remanente.
Mi verdadero vicario, descartado, luchará para dirigir a los hijos de Dios lo mejor posible.
Seré Yo, Jesucristo, quien os guíe, os eleve y os libere del mal, que os será impuesto; un mal, que tendrá un final abrupto y terrible, para todos aquellos que se pongan del lado del Anticristo y de sus esclavos.
Vuestro Jesús